Para los no judíos es una festividad tradicional de los judíos sin que necesariamente sean creyentes. Creo que es una de las tantas tradiciones que ha mantenido a un pueblo unido, sea o no religioso.
Sin embargo, si sabemos un poquito nada más creo que significa un acontecimiento en la vida de un pueblo que no quería ser esclavo, fue un acto en pos de su libertad como pueblo. Y entonces cobra una dimensión extraordinaria que todos deberíamos festejar si conociéramos su trascendencia.
Cuando hablamos de civilización, cultura, justicia y todo aquello que nos hace personas más evolucionadas estamos hablando de libertad, entonces Pesaj debería ser un acontecimiento que nos atañe a todos. Es el ejemplo de un pueblo que en el momento en que decidió rebelarse no tenía más fortaleza que su determinación de no ser esclavo.
Libertad es aquello a lo que tenemos derecho a aspirar y termina donde comienza la libertad de los demás, en ese sentido los judíos son un ejemplo de respeto hacia los otros. Viven su religión y su identidad sin ánimo de afectar las de los que no lo son.
Esto es fácil de decir pero creo que el resto de las religiones hace un proselitismo que ha conseguido que otras creencias se hayan expandido en regiones donde lograron imponerse sin ninguna razón valedera más que cumplir con el objetivo de multiplicar los creyentes de la propia. Es el propósito de controlar las almas por medio de la religión, la peor de las dominaciones.
Creo que eso ha pasado con el cristianismo y el islam, aparecen donde no tenían ningún arraigo previo, eso es lo que ha hecho que los judíos sean tan pocos y el resto no cesa de multiplicarse.
Por eso creo que Israel era imprescindible, un pueblo tan pequeño necesitaba un territorio donde afianzarse y ese lugar era sin duda aquél donde había nacido su religión y su identidad y del que había sido echado.
Entonces cuando pienso en Pesaj pienso en Israel y su profundo sentido. Y qué veo... un país fuerte, generoso, la tierra prometida de los judíos y de tantos que no siéndolo han recorrido el desierto en busca de esa libertad que no gozan en sus países de origen.
Parecía un imposible, pero el tesón, la voluntad inquebrantable de seguir siendo lo que se es lo hizo posible.
Pésaj e Israel son una misma cosa: la lucha por la libertad... Y cuando miro a Israel me siento deslumbrada en más de un sentido, lo que veo y lo que significa.
Feliz Pesaj para todos, larga vida a Israel, símbolo de la libertad de los pueblos.
ANA
