jueves, 30 de septiembre de 2010

680 - DISCURSO DE LIEBERMAN ANTE LA ONU - 2010


MENSAJE DEL MINISTRO DE RELACIONES EXTERIORES
ANTE LA ASAMBLEA GENERAL DE NACIONES UNIDAS

MINISTRO AVIGDOR LIEBERMAN



Itongadol.- La segunda explicación, al tan largo enfrentamiento entre Israel y los palestinos, que obtuvo gran popularidad, es el que impone las raíces del problema en lo que llama “la ocupación”; es decir en las localidades establecidas en los territorios de Judea y Samaria y en los propios colonos. Según ese pensamiento solo el establecimiento de un estado palestino independiente, en Judea y Samaria y Gaza, podrá representar una garantía a la paz en la región. Alcanza con citar algunas evidencias conocidas por todos a fin de cuestionar esa concepción errónea: primero, Judea y Samaria estuvieron bajo control árabe durante diecinueve años (1948 hasta 1967).

Mensaje del Ministro de Relaciones Exteriores
Ante la Asamblea General de Naciones Unidas

Ministro Avigdor Lieberman

28 de septiembre, 2010

Sr. Presidente de la Asamblea,
Estimados colegas,
Damas y caballeros:

Ayer, al arribar a Nueva York, se comunicó conmigo uno de los jefes de las organizaciones judías y me preguntó ¿cómo enfrentó la presión que se ejerce hacia Israel? Por supuesto que eso es muy difícil, me dijo. Recordé un viejo chiste sobre cinco judíos que cambiaron nuestro modo de ver el mundo:

Moshe Raveinu, la ley es todo.
Yehoshua, el amor es todo.
Marx, el dinero, respondería sobre todo.
Freud, todo es sexo y
Einstein, todo es relativo.

Entonces respondí, a mi interlocutor, que todo es relativo. Por un lado, eso es, en verdad, muy difícil. Por otro, es más fácil que en el pasado ya que, ahora, contamos con una coalición y gobierno estable y el apoyo por parte de la mayoría de los ciudadanos de Israel.

Estamos dispuestos a una solución lógica y a cooperar con la comunidad internacional. Pero no estamos dispuestos a renunciar a la seguridad o a los intereses vitales del Estado de Israel.

Desde mis palabras iniciales, pretendo destacar que, en contradicción con la imagen que, en muchas ocasiones, muestran los medios internacionales, el espectro político en Israel no se divide entre los que quieren los que se oponen a la paz. Todos queremos la paz y la diferencia se centra en la pregunta sobre cómo actuar tras el objetivo de alcanzar la paz; sobre cómo llegar a la situación de seguridad y estabilidad en nuestra región. Por tanto la pregunta que se nos presenta es: ¿Por qué, durante los diecisiete años que transcurrieron desde que firmamos los Acuerdos de Oslo, no llegamos a un acuerdo integral que diera por finalizado el conflicto y la concesión, mutua, sobre futuras nuevas demandas? A pesar de los esfuerzos, por parte de excelentes personas y, a pesar de las mejores intenciones de personalidades como Itzhak Rabin, Shimon Peres, Biniamin Netanyhau, Ehud Barak, Ariel Sharon y Ehud Olmert; a pesar de los encuentros- cumbre celebrados en Camp David (entre Ehud Barak y Yasser Arafat con presencia del Presidente de Estados Unidos de entonces, Bill Clinton) y a pesar de la Cumbre de Anápolis (con presencia de Ehud Olmert y Mahmmud Abbas) aún estamos ante un pozo ciego.

De hecho, y en contrario a la idea generalizada que, el conflicto israelí-palestino es el que ocupa el foco de la inestabilidad en Medio Oriente, o que - ese conflicto- constituye el motivo de muchos otros en ésta parte del mundo, la realidad es diferente. Más del 90% de los enfrentamientos armados y las guerras en Medio Oriente, como sus víctimas desde la Segunda Guerra Mundial no es resultado del conflicto entre Israel y los palestinos y no tienen ninguna relación con el Estado de Israel sino que surgieron a partir de los conflictos entre musulmanes o en los países árabes entre sí.

La guerra de Irán-Irak, la guerra del Golfo, las guerras entre el norte y sur de Yemen, las masacres perpetradas en la ciudad de Hama en Siria y las guerras en Argelia y Líbano, son solo algunos ejemplos tomados de una lista mucho más larga.

La segunda explicación, al tan largo enfrentamiento entre Israel y los palestinos, que obtuvo gran popularidad, es el que impone las raíces del problema en lo que llama “la ocupación”; es decir en las localidades establecidas en los territorios de Judea y Samaria y en los propios colonos. Según ese pensamiento solo el establecimiento de un estado palestino independiente, en Judea y Samaria y Gaza, podrá representar una garantía a la paz en la región. Alcanza con citar algunas evidencias conocidas por todos a fin de cuestionar esa concepción errónea: primero, Judea y Samaria estuvieron bajo control árabe durante diecinueve años (1948 hasta 1967). En ese período de tiempo nadie trabajó a favor del establecimiento de un estado palestino. Los acuerdos de paz - con Egipto y Jordania- se concretaron a pesar de Judea y Samaria. Y. también lo contrario es correcto: Desalojamos veintiún prósperas localidades desde Gush Katif y desconectamos a más de 10.000 colonos de sus hogares y de sus localidades y todo lo que obtuvimos fue el fortalecimiento del gobierno de Hamas y los lanzamientos de miles de misiles a Sderot y el sur de Israel.

Otro argumento sostiene que la cuestión palestina impide la creación de un ámbito internacional firme contra Irán. Ese argumento no solo es equivocado sino irresponsable. Del mismo modo puede afirmarse que, la cuestión palestina, impide la acción contra Corea del Norte, la lucha contra los piratas en Somalia, una acción para la solución a la crisis humanitaria en Sudán o un exitoso enfrentamiento con el desafío de Afganistán.

Al igual que la Revolución de Khomenei no tuvo ninguna vinculación con la cuestión palestina, la decisión iraní de desarrollar armas atómicas no tuvo ninguna relación con el conflicto palestino.En nombre de la verdad, la relación de Irán con el conflicto israelí-palestino es todo lo contrario. Irán puede sobrevivir sin Hamas, la Jihad Islámica o Hezbollah pero, las organizaciones terroristas, no pueden subsistir sin Irán.

Con esa ayuda Irán puede frustrar, en cualquier momento, todo acuerdo entre Israel y los palestinos o entre Israel y Líbano.

Por ello, en el marco de un acuerdo estable con los palestinos que se ocupe de las verdaderas raíces del conflicto y sea sostenible en el tiempo, debe entenderse que, en principio, debe resolverse el problema iraní. Hay que ocuparse de las raíces del problema y no de sus señales.

Por supuesto que hay otros temas que obligan a una solución y la solución del problema iraní no es una condición suficiente para terminar con el conflicto entre Israel y los palestinos. Pero, el meollo del problema iraní es una de las condiciones necesarias para la solución del conflicto entre Israel y los palestinos.

En el intento por responder, al conflicto entre Israel y los palestinos, debemos enfrentarnos a problemas de dos tipos: emotivos y prácticos. Por tanto la solución debe llevarse a cabo en dos etapas. Los problemas emotivos son, en primer lugar, la ausencia absoluta de confianza entre las partes y temas como Jerusalén, el reconocimiento de Israel como estado nacional del pueblo judío y el problema de los refugiados. En esas condiciones, podremos concentrarnos en un acuerdo intermedio a largo plazo, por un período de, solo, algunas décadas.

Debe surgir una nueva generación que puedan crear confianza mutua y no influenciada por provocaciones o mensajes extremistas.

A fin de llegar a un acuerdo estable, debemos comprender que, el primer obstáculo práctico, para el alcance de un acuerdo es la fricción entre los dos pueblos. Como en cualquier otra parte del mundo, cuando existen dos pueblos, dos religiones y dos lenguas, que elevan demandas contrarias sobre la misma porción de tierra, surgen roces y enfrentamientos. Es posible nombrar ejemplos de conflictos étnicos a lo largo del mundo que prueban ese argumento: en los Balcanes, el Cáucaso, África, el Lejano Oriente o Medio Oriente. Cuando se logra crear una situación de separación eficaz entre dos poblaciones, los enfrentamientos se evitaron, resolvieron o desarrollaron en medida significativa. Alcanza con mencionar los ejemplos de la República de la ex Yugoslavia, la partición de Checoslovaquia o la independencia de Timor Oriental.

Por ello, el principio rector para alcanzar un acuerdo estable no es territorios a cambio de paz, sino intercambio de territorios poblados.

Espero que mis palabras sean entendidas con claridad: no me refiero a traspasos de población sino correr los límites, dejando al descubierto, del mejor modo, la realidad demográfica.

Damas y caballeros,

Los temas presentados no representan una visión fantasiosa y generan menos divisiones de lo que muchos piensan. De hecho, esa idea según la cual la inadecuación entre las líneas fronterizas y las regiones pobladas constituye una receta certera de conflictos es, desde siempre, una trivialidad conocida por todos en el mundo académico. Expertos líderes y respetables institutos de investigación naturalizaron el término “Right Sizing the State”, determinación aplicada de los límites del país, a fin de expresar la idea que debe generarse un equilibrio justo entre estado y pueblo con el objetivo de garantizar la paz. No se trata de una política sujeta a diferencias sino de una verdad empírica.

Sin embargo, más allá de la verdad empírica, está la verdad histórica: transcurrieron casi 4000 años de presencia del pueblo judío en la Tierra de Israel y del desarrollo de sus tesoros morales y espirituales que aportaron al florecimiento de Occidente.

2000 años de Diáspora, períodos de conquista y gobierno extranjero de los bizantinos, árabes, otomanos y otros, no lograron, y no lograrán nunca, desconectar la poderosa vinculación, inalterable, entre el pueblo judío y su tierra.

La pregunta sobre la Tierra de Israel no se relaciona solo con el sitio donde nos hallamos. La Tierra de Israel se vincula a nuestra esencia.

Para finalizar mis palabras, deseo recordar a todos los presentes en la sala, que la cita que decora la Explanada de Naciones Unidas fuera de éste edificio, fue dicha en Jerusalén hace 3000 años, por nuestro Profeta Isaías. De las espadas forjarán arados; de las lanzas, podaderas".

Inspirados en la profunda sabiduría escondida en esas palabras, oremos porque el camino, que conduce a la paz verdadera, según la visión del Profeta Isaías, oriente a los dos pueblos, hacia el establecimiento de dos estados nacionales que vivan uno junto al otro, en paz y seguridad.

Muchas gracias.


FUENTE:
ITON GADOL-DISCURSO LIEBERMAN ONU-29/09/10

FUENTE: MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES 29/09/10

FUENTE: CIDIPAL/AGENCIA JUDÍA DE NOTICIAS


COMENTARIO:

Hay muy poco que agregar a una propuesta que se sustenta en la historia y en infinidad de particiones que se han hecho en todo el mundo después de un conflicto entre pueblos. (Por ej: India-Pakistán). Alcanza con un ejemplo bastante contundente que explica las dificultades que enfrentan israelíes y árabes: cuando los israelíes "festejan" la creación del Estado de Israel, los palestinos conmemoran la "
Nakba" (catástrofe), su derrota por ese mismo acontecimiento. Esto ocurre en las escuelas y en todos los actos oficiales y no oficiales. De allí a cualquier otro tipo de festejos, como por ejemplo, los religiosos. Hay muchas otras diferencias, mientras que en Israel los árabes israelíes están representados en todos los ámbitos oficiales ¿lo estarían los judíos de Palestina en un Estado Palestino? (Por ejemplo, a un judío le está prohibido ser ciudadano jordano).

Parecería que la idea es excelente, claro que será criticada por quienes no comparten la "ideología" de Lieberman, y tratarán de desmerecer sus propuestas, aunque creo que las buenas ideas deberían ser consideradas por encima de las ideologías, si fuéramos un poco sensatos.

Se lo ha acusado de muchas cosas, algunas son terribles, pero si está donde está supongo que es porque no se le ha podido probar nada. Además, si tiene tal caudal de votos como para haber podido ocupar esa posición en este gobierno debe ser porque no es el fanático que dicen que es.

Demás está decir que Netanyahu no habrá podido más que desautorizar sus palabras, aunque estuviera de acuerdo, él está jugando otro partido...


ANA

Más información:

LIEBERMAN SIN PELOS EN LA LENGUA

Por JULIÁN SCHVINDLERMAN

Julián Schvindlerman, analista internacional, se refirió en su columna semanal por Radio Jai a las declaraciones del canciller israelí, Avigdor Lieberman, quien realizó una propuesta para resolver el conflicto entre israelíes y palestinos y las reacciones que tuvieron sus palabras.


Escuche la columna

FUENTE:
RADIO JAI-SCHVINDLERMAN-LIEBERMAN-21/09/10

miércoles, 29 de septiembre de 2010

679 - DOCUMENTO OFICIAL DE LA AP


LOS PALESTINOS QUIEREN LIBERTAD

Documento oficial de la AP para las negociaciones.

Autor: Autoridad Palestina

El siguiente texto es un resumen de la postura oficial de la AP. Redactada como una plataforma con varios puntos, aclara cuales son sus pretensiones en las actuales negociaciones de paz con Israel. El lector podrá juzgar si Israel está en condiciones de aceptar estos términos. Al mismo tiempo cabe recordar que un documento como este es la base para las tratativas y el resultado de las mismas, en caso de éxito, no incluirá el 100% de las aspiraciones de ningunas de las partes.

“Libertad significa control sobre nuestras fronteras”.

De acuerdo con el derecho internacional, que prohíbe a Israel o a cualquier otro Estado adquirir territorio por la fuerza, las fronteras del Estado palestino han de ser las mismas de la Margen Occidental, incluyendo Jerusalén Oriental, y Gaza de la forma que estaban antes de la ocupación de 1967. Una conexión territorial entre ambas es crucial para la integridad del Estado palestino, debe proveer de un movimiento de personas, bienes y vehículos libre e ilimitado entre esas dos áreas geográficas y debe tener acceso continuo a la comunidad internacional.

Jerusalén como capital.

Libertad significa tener nuestro Gobierno ubicado en nuestra capital histórica el centro de nuestra cultura y fe. Jerusalén no pertenece a una sola fe o pueblo.

Por siglos, Jerusalén ha sido el centro político, administrativo, cultural y religioso de Palestina. El área metropolitana de Jerusalén, una zona que se extiende entre Ramala y Belén ha sido por largo tiempo el motor de la economía palestina. Sin Jerusalén Oriental, no puede haber viabilidad política o económica para el nuevo Estado.

Los palestinos cristianos y musulmanes están comprometidos con respetar la libertad de culto y el acceso a los sitios religiosos en Jerusalén para todas las religiones. Todas las medidas posibles han de ser tomadas para proteger esos lugares y su dignidad.

Libertad significa respetar el derecho de los refugiados al retorno y el poder elegir como ese derecho se lleva a cabo. Libertad significa no ser más refugiado.

Por 62 años, los refugiados han estado atrapados en el exilio, separados de sus hogares, tierras y familias. Para ellos, que representan el 70% de todos los palestinos, libertad significa poder vivir en dignidad y tener esperanza para el futuro.

Libertad significa tener sus experiencias de desplazamiento y de posesión reconocidas. Libertad significa que se les retornen sus propiedades. Más importante; libertad significa tener el derecho a retornar a sus hogares, y elegir como ejercitan ese derecho.

Libertad significa no tener otro Estado construyendo ciudades y carreteras en nuestro propio país, como Israel realiza en este momento a través de sus asentamientos en nuestras tierras.

Colonialismo, opresión y discriminación sistemática son los puntales de la empresa de asentamiento israelí. Alrededor de 170 asentamientos israelíes están ubicados a través de Palestina, conectados por un sistema de carreteras segregadas que divide el territorio. Cientos de bloqueos de carreteras continúan impidiendo el acceso de los palestinos a nuestra fragmentada tierra, un muro de ocho metros de alto se mete dentro del territorio, encerrando todo Jerusalén, la tierra más fértil y los mejores recursos acuíferos en Palestina. Hoy, alrededor de medio millón de colonos viven en tierra ilegalmente tomada de los palestinos cristianos y musulmanes. Los asentamientos y su infraestructura asociada controlan casi el 40% del territorio palestino ocupado.

Junto con ser ilegales, los asentamientos israelíes son la principal amenaza para la viabilidad de una solución de dos Estados y, por tanto, para una paz justa y duradera.

Control de los recursos naturales.

Libertad significa acceso y control sobre nuestros recursos naturales, incluyendo el agua.

Desde su ocupación de la Margen Occidental, incluyendo Jerusalén Oriental, y Gaza en 1967, Israel ha prácticamente controlado los recursos acuíferos palestinos y privado a los palestinos de acceder a nuestra cuota de agua en violación al derecho internacional.

Obtener derechos de agua y la ubicación justa del agua es esencial para la viabilidad de una solución de dos Estados y la estabilidad futura de la región. Los palestinos deben tener control, y acceso, a nuestros recursos acuíferos. Los palestinos aceptan el principio de derecho internacional del agua estipulando que tanto Israel como Palestina tienen derecho a una distribución equitativa y razonable de las fuentes de agua compartida, incluyendo las de los cuatro acuíferos principales y el Río Jordán. Adicionalmente, Israel debe pagar compensación por el uso ilegal tanto pasado y actual de los recursos acuíferos palestinos, como se llama en el derecho internacional.

Libertad significa auto determinación: la habilidad de decidir nuestro propio destino, de trabajar, abrir negocios e ir a la escuela sin temor a tropas de otro país. Simplemente, libertad significa poder avanzar en nuestras vidas y en nuestro país libre.

Los 43 años de ocupación han afectada enormemente todos los aspectos de la vida palestina. La ocupación ha sido la causa primaria y abrumadora de la inseguridad del pueblo palestino e inestabilidad en la región. Por décadas, la ocupación ha creado un alto nivel de dependencia palestina de Israel en una serie de sectores y ha prevenido a los palestinos de lograr nuestro potencial económico. Un Estado palestino debe superar esa forzada dependencia. Terminar con la ocupación israelí a través de una retirada total del territorio palestino, espacio aéreo y aguas territoriales sin residuos de presencia o control israelí es un requerimiento básico para la creación de un Estado palestino, para la resolución del conflicto y para la estabilidad regional.

Negociaciones exitosas deben llevar al establecimiento de un Estado palestino soberano con Jerusalén Oriental como su capital, y el derecho al retorno de los refugiados palestinos.


FUENTE: AURORA -
DOCUMENTO OFICIAL DE LA AP-21/09/10

COMENTARIO:

Si éstas son las pretensiones palestinas hay muy pocas o nulas esperanzas de que se llegue a un acuerdo.

Empezando por Jerusalén, que era una ciudad destinada a estar bajo control internacional pero que fue tomada por la fuerza por Jordania. Ni hablar de todas las barbaridades que hicieron con los sitios sagrados judíos. Esos son los antecedentes cuando los árabes toman sitios sagrados de otras religiones. Por otra parte, Belén ha dejado de ser una ciudad habitada por cristianos, pocas familias han quedado porque son acosadas por los árabes palestinos al punto que pocos, muy pocos turistas cristianos la visitan, no hay hoteles adecuados ni seguridad. Las familias cristianas que habían vivido allí por centurias se han retirado.

Cuando reclaman las fronteras de 1967, son las que arriesgaron cuando intentaron atacar a Israel y que éste impidió destruyendo las fuerzas de Egipto, Siria y Jordania, tal como lo explica el video que podrán ver abajo. Y a esa situación no se podrá volver, Israel no podrá ser víctima de futuros agresores, como así lo indica cuando no aceptan la existencia del Estado de Israel, menos de un Estado Judío de Israel. De hacerlo volvería a la misma situación de estado amenazado, sin fronteras seguras. Eso fue lo que habría ocurrido entonces si no atacaba primero cuando los árabes le cerraron el Estrecho de Tirán, lo que fue "casus belli" y lo que volvería a ocurrir si Israel volviera a tener fronteras como aquéllas. Un país cortado por la mitad no será aceptado por Israel.

Los palestinos quieren tener continuidad territorial, la tenían e Israel carecía de ella, ahora es Israel quien tiene ese derecho, los palestinos la arriesgaron tratando de destruir a Israel. Todo cambio en la situación de ambas partes será para conveniencia mutua, pero Palestina no podrá ser un estado militarizado, Gaza demuestra que eso no es aceptable. Ya vemos la importancia que tiene la comunidad Internacional para impedir que un estado Palestino ataque a Israel. Ninguna.

Estamos hablando de 1967, pero "La
OLP fue creada por la Liga Árabe en 1964 y sus objetivos declarados eran la destrucción del Estado de Israel..." para que no haya dudas sobre las intenciones árabes.

La AP es parte de la OLP, y Abbas es el heredero del poder de su figura más importante, Arafat. Consulten el sitio, por favor.

Traten de saber de qué se trata la
GUERRA DE LOS SEIS DÍAS porque si no es imposible tener una idea acabada de qué pasó y por qué Israel discute las fronteras, porque ya no puede volver a estar en una situación donde pueda ser fácilmente atacada.

Por otra parte, Jerusalén nunca fue nada importante para los árabes musulmanes, cuyo verdadero sitio que los reúne a todos es la Meca. Todo lo contrario, los sitios sagrados de Jerusalén y toda la ciudad se convirtió en lo que es, a partir del valor que los israelíes le dieron. Hoy día es una ciudad tan sagrada para los cristianos, judíos y musulmanes como lo es la Meca para los musulmanes. ¿O fueron los musulmanes quienes rezaron durante siglos "el año que viene en Jerusalén"?

Colonialismo es ocupación de una tierra que no pudo defenderse, ocupación que impone su cultura y extrae las riquezas del dominado, Israel ocupa sitios sagrados a los que no tenía acceso bajo control palestino y parte del territorio de un pueblo que luchó para destruirlo, el acuerdo será paz, seguridad y reconocimiento por el futuro Estado Palestino. Eso es lo razonable y no creo que pueda ser diferente después de la experiencia de Gaza. El mundo podrá decir todo lo que quiera en contra de Israel, pero ¿dónde está cuando caen los misiles de una zona de la que se retiró completamente como Gaza? Israel ya no puede dejar su destino en manos de los organismos internacionales.

En cuanto a los refugiados palestinos, todo los países que pierden una guerra son absorbidos por otros, esto ha ocurrido siempre. En particular los palestinos deberían ser absorbidos por los mismos que los llevaron a una guerra. Los estados árabes se negaron a absorberlos en sus propios países, hasta el día de hoy. Israel absorbió a todos sus refugiados que provenían de estados árabes. Es hora de decirlo una vez más, y nadie los ayudó, no hubo ninguna ONG que se acordara de ellos ni de las reparaciones que merecían cuando dejaron todos sus bienes escapando como podían.

Tenían LIBERTAD, la arriesgaron, la perdieron. ¿Qué ofrecen ahora para recuperar la libertad que no afecte la seguridad de Israel?

Todo lo que exigen es para que no haya ningún tipo de acuerdo y sigan amparándose bajo el manto protector de un mundo que no sabe nada o no quiere saber.

ANA


LA GUERRA DE LOS SEIS DÍAS



FUENTE:
artehistoriacom

ISRAEL "GUERRA DE LOS SEIS DÍAS"



FUENTE:
FernandoDCM

lunes, 27 de septiembre de 2010

678 - LO QUE OBAMA NO DIJO


HAY UNA GUERRA CALIENTE QUE NO SE PUEDE IGNORAR


Abajo encontrarán el texto de un discurso del parlamentario holandés Geert Wilders, una síntesis de lo mucho que se escribe en la red. El problema de la penetración musulmana en occidente existe, él cita cómo se ve y se sufre en Europa, Estados Unidos todavía es una isla, el último baluarte de la cultura occidental.

Y Obama habló de conflictos de religiones, sin especificar cuáles, como si esa fuera la causa de los problemas en Medio Oriente. El conflicto lo plantea el islamismo como ideología y no sólo como religión. Nadie puede salirse de ella y su ambición es un califato universal. La penetración del islamismo en Europa ya es innegable y Obama ni tocó el tema.

Se hará por las buenas o por las malas, por conversión en países no musulmanes y por obligación en sus países. El asesinato de quienes se han atrevido a "ofenderlos" es algo que está en los medios, los acusados deben ocultarse en Estados Unidos, no en Europa, allí ya no es un lugar seguro, y los judíos huyen de Europa como en las peores épocas.

Y todavía se pone en duda no sólo la legitimidad de Israel sino la necesidad imperiosa de tener un lugar que no les negará un refugio seguro. Lo seguirán atacando, lo cuestionarán, pero los judíos del mundo tienen un hogar que no los rechazará como en el pasado.

Obama fue educado en su niñez y adolescencia en una religión solamente, no quiere ver en qué se ha convertido hoy el islam, en un islamismo fanático que está reverdeciendo los tiempos de Mahoma. Y nadie está a salvo, ni siquiera los musulmanes religiosos pacíficos, para los fanáticos "estás conmigo o contra mi".

En EE.UU. no se usa la palabra Jihad porque según el islam de Obama significa "purificación", pero en la realidad cotidiana es guerra contra el infiel, que somos todos los demás.

Vale citar dos párrafos del discurso de Wilders:

"Pero existe un peligro mucho más grande, aun, que los ataques terroristas, y ello es el escenario de EEUU como el ultimo pueblo en pie. Podría suceder que las luces de Europa se apaguen mucho antes de lo que nos podamos imaginar.

Una Europa Islámica significaría una Europa sin libertad y sin democracia, un territorio desierto económicamente, una pesadilla intelectual, y la pérdida del poderío militar para América, por cuanto sus aliados se convertirían en enemigos, enemigos con bombas atómicas. Con una Europa islámica, solo nos quedaría EE.UU. para preservar la herencia de Roma, Atenas y Jerusalem."


Esto es lo que no dijo Obama, no tenerlo en cuenta en su discurso equivale al apaciguamiento de nuestros días.

Lean el discurso de Wilders, un europeo que nos está alertando.

ARTÍCULO RECOMENDADO:

HISPANOARGENTINOS.COM

domingo, 26 de septiembre de 2010

677 - DISCURSO DE OBAMA EN LA ONU - 2010


TEXT OF PRESIDENT BARACK OBAMA´S ADDRESS TO THE UNGA (ESPAÑOL)

(
TRADUCIDO POR ANA)

TEXTO DEL DISCURSO DEL PRESIDENTE BARACK OBAMA A LA ASAMBLEA GENERAL DE LA ONU

Comentarios del Presidente Barack Obama Preparado para su Intervención

Discurso para la Asamblea General de las Naciones Unidas

Nueva York, NY - 23 de septiembre 2010

Señor Presidente, Señor Secretario General, compañeros delegados, señoras y señores:

Es un honor dirigirme a esta Asamblea por segunda vez, casi dos años después de mi elección como Presidente de Estados Unidos.

Sabemos que este no es un tiempo normal para nuestro pueblo. Cada uno de nosotros viene aquí con sus propios problemas y prioridades. Pero también hay desafíos que tenemos en común como líderes y como naciones.

Nos encontramos dentro de una institución construida a partir de los escombros de la guerra para unir al mundo en búsqueda de la paz. Y estamos en una ciudad que -durante siglos- ha dado la bienvenida a personas de todo el mundo, lo que demuestra que los individuos de todos los colores, creencias y posición social pueden unirse en busca de oportunidades; construir una comunidad y vivir con la bendición de la libertad humana.

Fuera de las puertas de esta sala, las cuadras y los barrios de esta gran ciudad cuentan la historia de una década difícil. Hace nueve años, la destrucción del World Trade Center, señaló una amenaza que no respeta los límites de la dignidad o de la decencia. Hace dos años este mes, una crisis financiera en Wall Street devastó a las familias norteamericanas en Main Street. Estos problemas distintos han afectado a los pueblos de todo el mundo. Hombres, mujeres y niños han sido asesinados por extremistas desde Casablanca a Londres, desde Jalalabad a Yakarta. La economía mundial sufrió un golpe muy duro durante la crisis financiera, paralizando a los mercados y aplazando los sueños de millones en todos los continentes. Por debajo de estos desafíos a nuestra seguridad y prosperidad yacen temores más profundos: que viejos odios y divisiones religiosas están una vez más en ascenso, que un mundo que ha crecido más interconectado, de alguna manera se ha deslizado fuera de nuestro control.

Estos son algunos de los retos que mi gobierno ha enfrentado desde que asumimos el poder. Hoy me gustaría hablarles acerca de lo que hemos hecho en los últimos 20 meses para responder a estos desafíos, que nuestra responsabilidad es buscar la paz en Medio Oriente, y qué clase de mundo estamos tratando de construir en este siglo 21.

Permítanme comenzar con lo que hemos hecho. En nada me he concentrado más como Presidente que en rescatar a nuestra economía de una catástrofe potencial. Y en una época en que la prosperidad se comparte, no podíamos hacerlo solos. Entonces Norteamérica se ha unido a las naciones de todo el mundo para estimular el crecimiento y la demanda renovada de que podría recomenzar la creación del empleo. Estamos reformando nuestro sistema de las finanzas mundiales, empezando por la reforma de Wall Street en casa, para que una crisis como ésta nunca vuelva a suceder. Y hemos hecho del G-20 el punto central para la coordinación internacional, porque en un mundo donde la prosperidad está más difusa, debemos ampliar nuestro círculo de cooperación para incluir a las economías emergentes.

Hay mucho para mostrar sobre el resultado de nuestros esfuerzos, aún cuando hay mucho más trabajo por hacer. La economía mundial se ha retirado desde el borde de una depresión, y está creciendo una vez más. Hemos resistido el proteccionismo, y estamos explorando las formas de expandir el comercio e intercambio entre las naciones. Pero no podemos descansar -y no lo haremos- hasta que estas semillas de progreso se conviertan en una prosperidad más amplia, para todos los norteamericanos y para los pueblos de todo el mundo.

En cuanto a nuestra seguridad común, Norteamérica está librando una lucha más eficaz contra Al Qaeda, mientras que está terminando la guerra en Irak. Desde que asumí el poder, Estados Unidos ha sacado de Irak cerca de 100.000 soldados. Lo hemos hecho responsablemente, en tanto los iraquíes han hecho la transición para tomar la responsabilidad de la seguridad de su país. Ahora estamos enfocados en la creación de una asociación duradera con el pueblo iraquí, manteniendo nuestro compromiso de sacar al resto de nuestras tropas a finales del próximo año.

Mientras nos retiramos de Irak, nos hemos concentrado en derrotar a Al Qaeda y en negarles a sus asociados un refugio seguro. En Afganistán, Estados Unidos junto con nuestros aliados estamos llevando a cabo una estrategia para romper el impulso de los Talibán y para desarrollar la capacidad del gobierno afgano y de sus fuerzas de seguridad, de modo que una transición hacia la responsabilidad afgana pueda comenzar en julio próximo. Y desde el sur de Asia hasta el Cuerno de África, nos estamos moviendo hacia un enfoque más específico, uno que refuerce a nuestros socios y desmantele las redes terroristas sin desplegar grandes ejércitos norteamericanos.

Mientras perseguimos a los extremistas más peligrosos del mundo, también estamos negándoles las armas más peligrosas existentes, en pos de la paz y la seguridad en un mundo sin armas nucleares. A principios de este año, 47 naciones han adoptado un plan de trabajo para poner a seguro todos los materiales nucleares vulnerables dentro de los próximos cuatro años. Nos hemos unido a Rusia para firmar el acuerdo de control de armas más completo en décadas. Hemos reducido el papel de las armas nucleares en nuestra estrategia de seguridad. Y aquí, en las Naciones Unidas, nos reunimos para fortalecer el Tratado de No Proliferación Nuclear.

Como parte de nuestros esfuerzos en materia de no proliferación, ofrecí a la República Islámica de Irán una mano extendida el año pasado, y subrayé que tiene derechos y responsabilidades como miembro de la comunidad internacional. También dije -en esta sala- que Irán debe ser considerado responsable si no cumpliera con esas responsabilidades. Eso es lo que hemos hecho. Irán es el único partido en el TNP que no puede demostrar las intenciones pacíficas de su programa nuclear, y esas acciones tienen consecuencias. Por medio de la Resolución 1929 del Consejo de Seguridad de la ONU, pusimos en claro que la ley internacional no es una promesa vacía.

Ahora permítanme ser claro una vez más: Estados Unidos y la comunidad internacional busca una resolución a nuestras diferencias con Irán, y la puerta sigue abierta a la diplomacia si Irán decide caminar a través de ella. Pero el gobierno iraní debe demostrar un compromiso claro y creíble, y confirmar al mundo la intención pacífica de su programa nuclear.

A medida que combatimos la propagación de armas mortíferas, también estamos enfrentando el fantasma del cambio climático. Después de realizar en casa inversiones históricas en materia de energía limpia y eficiencia, ayudamos a forjar un Acuerdo en Copenhague que -por primera vez- compromete a todas las grandes economías a reducir sus emisiones. Esto es sólo un primer paso. En el futuro, vamos a apoyar un proceso en el que todas las grandes economías cumplan con las responsabilidades de proteger a nuestro planeta, mientras que liberan el poder de una energía limpia para servir como motor del crecimiento y desarrollo.


Norteamérica también ha abrazado responsabilidades únicas que vienen con nuestro poder. Desde que llegaron las lluvias y las inundaciones crecieron en Pakistán, nosotros comprometimos nuestra asistencia, todos deberíamos apoyar al pueblo pakistaní en su recuperación y reconstrucción. Y cuando la tierra tembló y Haití fue devastada por las pérdidas, en respuesta nos unimos a una coalición de naciones. Hoy honramos a los miembros de la familia de las Naciones Unidas que perdieron su vida en el terremoto, y nos comprometemos a apoyar al pueblo de Haití hasta que puedan pararse sobre sus propios pies.

En medio de esta agitación, hemos sido persistentes en la búsqueda de la paz. El año pasado comprometí mis mejores esfuerzos para apoyar el objetivo de dos estados, Israel y Palestina, viviendo lado a lado en paz y seguridad, como parte de una paz global entre Israel y todos sus vecinos. Hemos recorrido un camino sinuoso en los últimos doce meses, con pocos picos y muchos valles. Pero este mes estoy complacido porque hemos continuado con negociaciones directas entre israelíes y palestinos en Washington, Sharm el-Sheij y Jerusalén.

Ahora muchos son pesimistas acerca de este proceso. Los cínicos dicen que los israelíes y los palestinos desconfían demasiado unos de otros, y que están demasiado divididos internamente para forjar una paz duradera. Los detractores de ambos lados tratan de interrumpir el proceso, con palabras amargas y con bombas. Algunos dicen que las brechas entre las partes son demasiado grandes, que la posibilidad de que las conversaciones se rompan también es demasiado grande y que después de décadas de fracasos la paz simplemente no es posible.

Pero consideren alternativas. Si no se alcanza un acuerdo, los palestinos nunca conocerán el orgullo y la dignidad que viene con su propio estado. Los israelíes nunca conocerán la certeza y seguridad que viene de vecinos soberanos y estables que están comprometidos con la coexistencia. Tendrán lugar las duras realidades de la demografía. Más sangre será derramada. Esta Tierra Santa seguirá siendo un símbolo de nuestras diferencias, en lugar de nuestra humanidad común.

Me niego a aceptar ese futuro. Todos tenemos que tomar una decisión. Y cada uno de nosotros debe elegir el camino de la paz. Esa responsabilidad comienza con las propias partes, que deben responder al llamado de la historia. A principios de este mes, en la Casa Blanca, me impresionaron las palabras tanto de los dirigentes israelíes como de los palestinos. El Primer Ministro Netanyahu dijo: "Hoy vine aquí para encontrar un compromiso histórico que permitirá a ambos pueblos vivir en paz, seguridad y dignidad." El Presidente Abbas dijo: "No escatimaremos esfuerzos y trabajaremos con diligencia y sin descanso para asegurar que estas negociaciones logren su objetivo."

Estas palabras deben ser seguidas por acciones, y creo que ambos líderes tienen el coraje de hacerlo. Pero el camino que tienen que recorrer es difícil, por eso hago un llamamiento a israelíes y palestinos -y al mundo- para que se reúnan detrás del objetivo que estos dirigentes comparten. Sabemos que habrá pruebas a lo largo del camino, y que se acerca rápidamente.
La moratoria de los asentamientos de Israel ha hecho una diferencia en el terreno, y mejoró la atmósfera para las conversaciones. Nuestra posición sobre esta cuestión es bien conocida. Creemos que la moratoria debería extenderse. También creemos que las conversaciones deberían seguir avanzando hasta que estén terminadas. Ahora es el momento para que las partes se ayuden mutuamente a superar este obstáculo. Ahora es el momento de construir confianza -y dar tiempo- para el progreso sustancial que se debe hacer. Ahora es el momento para aprovechar esta oportunidad de modo que no se escape.

La paz debe ser hecha por los israelíes y los palestinos, pero cada uno de nosotros también tiene la responsabilidad de hacer su parte. Aquellos de nosotros que son amigos de Israel deben entender que la verdadera seguridad para el Estado judío requiere una Palestina independiente, una que permita al pueblo palestino vivir con dignidad y oportunidades. Y aquellos de nosotros que son amigos de los palestinos deben entender que los derechos del pueblo palestino se ganarán sólo por medios pacíficos, incluyendo una auténtica reconciliación con un Israel seguro.

Muchos en este salón se cuentan como amigos de los palestinos. Pero estas promesas ahora debe estar respaldadas por los hechos. Aquellos que han firmado la
Iniciativa de Paz Árabe (1) deberían aprovechar esta oportunidad para hacerla realidad mediante la adopción de medidas tangibles hacia la normalización que promete a Israel. Aquellos que hablan a favor de la autonomía palestina deberían ayudar a la Autoridad Palestina política y económicamente, y -al hacerlo- ayudarían a los palestinos a construir las instituciones de su estado. Y aquéllos que están deseando ver el ascenso de una Palestina independiente deben dejar de tratar de destruir a Israel.

Después de miles de años, judíos y árabes no son extraños en una tierra extraña. Y después de sesenta años en la comunidad de las naciones, la existencia de Israel no debe ser un tema de debate. Israel es un estado soberano y la patria histórica del pueblo judío. Debe quedar claro para todos que los esfuerzos para debilitar la legitimidad de Israel sólo se encontrarán con la oposición inquebrantable de Estados Unidos. Y los esfuerzos para amenazar o matar a israelíes no hacen nada para ayudar al pueblo palestino, la masacre de israelíes inocentes no es resistencia, es injusticia. No nos equivoquemos: el coraje de un hombre como el Presidente Abbas -que lucha por su pueblo frente al mundo (2)- es mucho mayor que los que disparan cohetes a las mujeres y niños inocentes.

El conflicto entre israelíes y árabes es tan antiguo como esta institución. Y podemos volver aquí, el próximo año, como lo hemos hecho los últimos sesenta, y hacer largos discursos al respecto. Podemos leer listas de quejas conocidas. Podemos presentar las mismas resoluciones. Podemos darle más poder a las fuerzas del rechazo y el odio. Podemos perder más tiempo continuando una discusión que no ayudará a un solo niño israelí o palestino a lograr una vida mejor. Podemos hacer eso.

O bien, podemos decir que esta vez será diferente, que esta vez no vamos a dejar que el terror, la turbulencia, las posturas o la mezquina política se interponga en el camino. Esta vez vamos a pensar no en nosotros, sino en la muchacha de Gaza que no quiere tener límites para sus sueños, o el muchacho de Sderot que quiere dormir sin la pesadilla de los ataques con cohetes. Esta vez, deberíamos recurrir a las enseñanzas de tolerancia que se encuentran en el corazón de las tres grandes religiones que ven a la tierra de Jerusalén como sagrada. Esta vez deberíamos obtener lo mejor dentro de nosotros mismos. Si lo hacemos, cuando volvamos el año que viene, podremos tener un acuerdo que dará lugar a un nuevo miembro de las Naciones Unidas, un estado de Palestina, independiente y soberano, que viva en paz con Israel.

Es nuestro destino llevar la carga de los retos a los que me he referido, la recesión, la guerra y el conflicto. Y siempre hay un sentido de urgencia -inclusive emergencia- que impulsa la mayor parte de nuestra política exterior. En efecto, después de milenios marcados por las guerras, esta misma institución refleja el deseo de los seres humanos por crear un foro para hacer frente a las emergencias que inevitablemente vendrán.

Pero incluso cuando nos enfrentamos a desafíos inmediatos, también debemos tomar previsiones para más allá de ellos y considerar qué estamos tratando de construir en el largo plazo. ¿Cuál es el mundo que nos espera cuando las batallas de hoy lleguen a su fin? Sobre eso es de lo que me gustaría hablar hoy con el tiempo que me queda.

Una de las primeras acciones de esta Asamblea General fue adoptar una Declaración Universal de los Derechos Humanos en 1948. Esa Declaración comienza diciendo, "el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana es el fundamento de la libertad, la justicia y la paz en el mundo."

La idea es simple, que la libertad, la justicia y la paz para el mundo debe comenzar con la libertad, la justicia y la paz en las vidas de los seres humanos como individuos. Para Estados Unidos, esta es una cuestión de moral y necesidad pragmática. Como Robert Kennedy dijo, "el hombre individual, el hijo de Dios, es la piedra de toque del valor, y la sociedad toda, los grupos, el estado, existen para su beneficio." Por lo tanto, defendemos los valores universales porque es lo correcto. Pero también sabemos por experiencia que quienes defienden estos valores para sus pueblos han sido nuestros mejores amigos y aliados, mientras que los que han negado esos derechos -sean grupos terroristas o gobiernos tiránicos- han elegido ser nuestros adversarios.

Los derechos humanos nunca han sido cuestionados, en ninguna de nuestras naciones y tampoco en nuestro mundo. La tiranía todavía está entre nosotros, y se manifiesta cuando los Talibán matan a niñas que tratan de ir a la escuela, cuando un régimen norcoreano esclaviza a su propio pueblo o cuando grupos armados en Congo-Kinshasa usa la violación como un arma de guerra.
(3)

En tiempos de malestar económico, también puede haber preocupación por los derechos humanos. Hoy, como en tiempos pasados de intranquilidad económica, algunos ponen a un lado los derechos humanos con la promesa de una estabilidad a corto plazo o por la falsa noción de que el crecimiento de la economía vendrá a expensas de la libertad. Vemos a líderes aboliendo los límites de sus mandatos, aplicando mano dura sobre la sociedad civil, y a la corrupción la vemos sofocando a los emprendedores de negocios propios y al buen gobierno. Vemos que las reformas democráticas son demoradas indefinidamente.

Como dije el año pasado, cada país continuará en una trayectoria arraigada en la cultura de su pueblo. Sin embargo, la experiencia nos muestra que la historia está del lado de la libertad, que la base más sólida para el progreso humano se encuentra en las economías abiertas, las sociedades abiertas, y los gobiernos abiertos. En pocas palabras: la democracia, más que cualquier otra forma de gobierno, asiste a nuestros ciudadanos. Y que la verdad sólo se hará más fuerte en un mundo donde las fronteras entre las naciones sean borrosas
(4).

Norteamérica está trabajando para dar forma a un mundo que promueve esta apertura, la podredumbre de una economía cerrada o corrupta no debe jamás eclipsar la energía y la innovación de los seres humanos. Todos nosotros queremos tener el derecho a educar a nuestros hijos, ganar un salario digno, atender a los enfermos, e ir tan lejos como nuestros sueños y actos nos lleven. Pero eso depende de que las economías aprovechen el poder de nuestro pueblo, incluyendo el potencial de las mujeres y las muchachas.
(5) Eso significa permitir que los empresarios inicien un negocio sin tener que pagar un soborno, y que los gobiernos apoyen esa oportunidad en lugar de robar a su pueblo. Y también significa recompensar el trabajo duro en lugar de tomar riesgos imprudentes.

Ayer presenté una nueva política de desarrollo que persigue estas metas, reconociendo que la dignidad es un derecho humano y que el desarrollo mundial es para nuestro común interés. Norteamérica se asociará con las naciones que ofrecen a sus pueblos un camino para salir de la pobreza.
(6) Y juntos debemos liberar el crecimiento que impulsa a los individuos y a los mercados emergentes en todo el mundo.

No hay razón para que África no debiera ser un exportador de agricultura, razón por la cual nuestra iniciativa de seguridad alimentaria está otorgando poder a los agricultores. Y no hay razón por la cual los empresarios no deberían ser capaces de crear nuevos mercados en todas las sociedades, por tal razón auspicié una cumbre de empresarios a principios de esta primavera. Porque la obligación del gobierno es estimular a los individuos, no obstaculizarlos.

Lo mismo es válido para la sociedad civil. El arco del progreso humano ha sido formado por individuos con libertad para reunirse, por organizaciones fuera del gobierno que insistieron en el cambio democrático, y por los medios de comunicación libres que mantuvieron responsables a los poderosos. Hemos visto eso desde los sudafricanos que se enfrentaron al apartheid, a los polacos de Solidaridad, a las madres de los desaparecidos que hablaron en contra de la Guerra Sucia, a los norteamericanos que marcharon por los derechos de todas las razas, incluida la mía.

La sociedad civil es la conciencia de nuestras comunidades, y Norteamérica siempre ampliará nuestro compromiso con los ciudadanos en el extranjero más allá de los salones del gobierno. Les vamos a llamar la atención a aquéllos que suprimen las ideas, y a servir como una voz para los sin voz. Vamos a promover nuevas herramientas de comunicación para que la gente tenga la capacidad de conectarse entre sí y, en las sociedades represivas, para hacerlo con seguridad. Vamos a apoyar una Internet libre y abierta, para que los individuos tengan información para tomar sus propias decisiones. Y es tiempo de abrazar -y supervisar de manera efectiva- las normas que promuevan los derechos de la sociedad civil y garanticen su expansión dentro y fuera de las fronteras.

La sociedad abierta sostiene a un gobierno abierto, pero no puede sustituirlo. No hay derecho más fundamental que la capacidad de escoger a sus líderes y determinar sus destinos. No nos equivoquemos: el éxito final de la democracia en el mundo no vendrá porque los Estados Unidos lo dicte, sino que vendrá porque cada ciudadano exija expresar su opinión sobre la forma en que son gobernados.

No hay suelo donde esta noción no pueda arraigarse, al igual que cada democracia refleja la singularidad de una nación. A finales de este otoño, voy a viajar a Asia. Voy a visitar la India, que pacíficamente se quitó el colonialismo y estableció una democracia floreciente de más de mil millones de personas. Voy a continuar con Indonesia, el más grande país de mayoría musulmana, que une a miles de islas por medio de un gobierno representativo y de una sociedad civil. Voy a unirme a las reuniones del G-20 en la península de Corea, que ofrece el más claro contraste mundial de una sociedad que es dinámica y abierta, y una que está aprisionada y cerrada. Concluiré mi viaje en Japón
(7),
una cultura antigua que encontró la paz y un desarrollo extraordinario a través de la democracia.

A su manera, cada uno de estos países da vida a los principios democráticos. Y así como algunos gobiernos revirtieron la reforma, también celebramos el coraje de un presidente de Colombia que por voluntad propia se hizo a un lado, o la promesa de una nueva Constitución en Kenia. El tema común del progreso es el principio de que el gobierno es responsable ante sus ciudadanos. La diversidad en esta sala deja claro, ningún país tiene todas las respuestas, pero todos nosotros debemos responder a nuestra propia gente. En todas las partes del mundo, vemos la promesa de la innovación para hacer al gobierno más abierto y responsable. Ahora debemos construir sobre ese progreso. Y cuando nos reunamos de nuevo aquí el año que viene, deberíamos traer compromisos específicos para promover la transparencia, combatir la corrupción, dinamizar la participación ciudadana, y para impulsar las nuevas tecnologías para que podamos fortalecer la base de la libertad en nuestros propios países, mientras que vivimos a la altura de los ideales capaces de iluminar al mundo.

Esta institución todavía puede jugar un papel indispensable en el avance de los derechos humanos. Es hora de dar la bienvenida a los esfuerzos de la ONU sobre la Mujer para proteger los derechos de las mujeres en todo el mundo. Es hora de que todos los estados miembros abran sus elecciones a los observadores internacionales, como también aumentar el Fondo para la Democracia de las Naciones Unidas. Es hora de revitalizar las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU, para que las misiones tengan los recursos necesarios para tener éxito, por lo que atrocidades como la violencia sexual puedan ser evitadas y se refuerce la justicia, porque ni la dignidad ni la democracia pueden prosperar sin una seguridad básica. Y también es el momento de hacer a esta institución más responsable, porque los retos de un nuevo siglo exigen nuevas formas de servir a nuestros intereses comunes.

El mundo que Norteamérica busca no es el que podemos construir por nuestra cuenta. Para que los derechos humanos alcancen a quienes sufren bajo la bota de la opresión necesitamos que sus voces hablen claro. En particular, hago un llamamiento a las naciones que surgieron de la tiranía e inspiraron al mundo en la segunda mitad del siglo pasado, desde Sudáfrica hasta el sur de Asia, desde Europa oriental a América del Sur. No hay que quedarse sin hacer nada cuando los disidentes de cualquier parte son encarcelados y los manifestantes son golpeados. Porque parte del precio de nuestra propia libertad es defender la libertad de los demás.

Esa creencia guiará el liderazgo de Estados Unidos en este siglo 21. Es una creencia que nos ha visto a través de más de dos siglos de prueba, y nos va a ver a través de los desafíos que enfrentamos en la actualidad, ya sea la guerra o la recesión, el conflicto o la división. Así que aun cuando hemos atravesado una década difícil, yo estoy aquí ante ustedes confiado en el futuro, un futuro donde Irak no estará gobernado ni por un tirano ni por una potencia extranjera, y Afganistán se librará de las turbulencias de la guerra; un futuro donde los hijos de Israel y de Palestina podrán construir la paz que no fue posible para sus padres, y que la promesa de desarrollo llegará a las cárceles de la pobreza y la enfermedad; un futuro donde la nube de la recesión cederá paso a la luz de la renovación, y el sueño de la oportunidad estará disponible para todos.

Este futuro no será fácil de alcanzar. No va a venir sin contratiempos, ni se le exige rapidez. Pero la fundación de las Naciones Unidas es en sí misma un testimonio del progreso humano. En épocas mucho más difíciles que las nuestras, nuestros predecesores eligieron la esperanza de la unidad a la facilidad de la división e hicieron una promesa a las futuras generaciones que la dignidad e igualdad de los seres humanos sería nuestra causa común.

Nos corresponde a nosotros cumplir esa promesa. Y a pesar de que nos enfrentaremos a fuerzas oscuras que pondrán a prueba nuestra determinación, los norteamericanos siempre han tenido motivos para creer que podemos elegir una historia mejor. De hecho, sólo tenemos que mirar más allá de las paredes que nos rodean. Porque por medio de los ciudadanos de toda imaginable ascendencia que hacen de ésta, su ciudad propia, vemos la prueba viviente de que todos pueden tener acceso a la oportunidad; que lo que nos une como seres humanos es mucho mayor que lo que nos divide, y que la gente de cualquier parte de este mundo puede vivir junta en paz. Gracias.

FUENTE:
VOANEWS-OBAMA ADDRESS-23/09/10

COMENTARIO:

Es un excelente discurso lleno de buenas intenciones pero falta realismo en el diagnóstico del presente. Entonces los remedios que se apliquen no serán los apropiados.

Obama dice que se han retirado 100.000 soldados de Irak, pero quedan 50.000 para proteger los intereses de Estados Unidos. 50.000 son demasiados para hablar de retirada, además, ¿qué pasará dentro de un año?, ¿quien protegerá los intereses de Estados Unidos allí?

Ni hablar de las perspectivas en Afganistán y Pakistán...

Las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos fueron obligadas, ninguna de las partes habían acordado "algo básico" que fuera sustento para las conversaciones. Hoy sabremos si Israel da una nueva moratoria para el congelamiento de las construcciones y qué harán los palestinos. Cualquiera sea el resultado, alguien saldrá mal parado frente a su propia gente, ya se había dado una moratoria de diez meses, ésta es sólo para provocar una ruptura o una nueva exigencia que los palestinos interpretarán como un triunfo.

Porque repetir la misma cosa, año tras año, no puede cambiar el resultado, un resultado nuevo debe partir de actitudes nuevas.

(1) ¿Como puede citar la Iniciativa de Paz Árabe? ¿La leyeron? Esa iniciativa es para resolver los problemas palestinos no los de los israelíes. Y cuando los árabes la citan, dicen que no se puede modificar ni una sola coma. Obama dice que se la puede aprovechar para hacerla realidad, no se puede menos que pensar que Obama no la leyó o no la entendió... Además, es una Iniciativa de Paz Árabe, no palestina. Aunque sea conveniente para los palestinos, éstos siempre podrán decir: no la hicimos nosotros. Y todo empieza otra vez, porque los palestinos no quieren reconocer un Estado Israelí y menos un Estado Judío Israelí. Las razones las explica bien Perednik en este
audio que recomiendo.

Basta leer las
declaraciones árabes para comprender la diferencia entre lo que piensa Obama sobre la situación y lo que piensan los árabes.

(2) Abbas no lucha frente al mundo, porque el mundo lo apoya y está luchando por él, en realidad debería decir que está luchando frente al mundo palestino que no quiere ningún acuerdo de paz y, como Abbas, no reconoce al Estado de Israel y mucho menos al Estado Judío de Israel.

(3) No hace ninguna alusión a las crueldades de la sharía, para Obama eso no sería políticamente correcto, él no puede hablar del islamismo fanático que está haciendo estragos en todo el mundo. Evidentemente se cuida bien de no nombrarlo, aunque debería.

(4) ¿Y de qué se trata el muro entre Estados Unidos y México? ¿Y la persecución de los ilegales en Estados Unidos?

(5) No dice dónde está ese potencial que no se aprovecha, no sea que los países árabes musulmanes se "ofendan", como suelen hacerlo cada vez que se los critica.

(6) ¿Cumplirá con la responsabilidad que le corresponde con
Níger?

(7) Japón se desarrolló porque se dijo la verdad, se dejó atrás la divinidad del Emperador. Allí comenzó su despegue.

Este discurso se corresponde con los ideales del mundo occidental, aún cuando existió un colonialismo salvaje por el que las potencias coloniales están pagando un precio, pero aún queda Níger y muchos otros sitios donde los intereses de occidente hacen estragos. Occidente quiere y puede cambiar, el problema es si el mundo musulmán quiere avanzar como lo hizo Japón o quiere imponernos su cultura que, hasta ahora, no los ha llevado a ninguna parte. Se siguen matando todo el tiempo entre ellos por cuestiones religiosas, no por los derechos humanos, ni la justicia social, ni el desarrollo. Lo malo es que nosotros también somos blanco de sus conflictos. Y Obama soslayó este problema aunque salta a la vista, no dio nombres, no señaló claramente de dónde proviene la violencia cuando habló de conflictos religiosos, pero debió decir entre quiénes, sólo que no lo puede hacer.

Ningún país que aplique la Sharía puede decir que respeta los derechos humanos, ni tampoco puede aspirar al progreso si la religión es una parte fundamental del gobierno. Eso nos diferencia, nos aparta y el camino a recorrer para que las fronteras sean borrosas todavía es demasiado largo, defenderse de culturas salvajes es un derecho del mundo civilizado.

El internacionalismo con el que Obama sueña no tiene en cuenta los intereses de cada nación, las costumbres, culturas y religiones que las diferencia, y cada una debe ser respetada en su individualidad y en su proyecto político.

Y, sobre todo, no todas tienen en la realidad una meta común.

ANA


viernes, 24 de septiembre de 2010

676 - PIPES: LA LEY DE RUSHDIE LLEGA A FLORIDA


LA VIOLENCIA DEL ISLAM OBTIENE PRIVILEGIOS


Leer el artículo de Pipes que recomiendo abajo nos habla claramente de esta lucha desigual de los islamistas contra el resto del mundo. Y no dejen de leerlo porque saber lo que ocurre pone en evidencia que no se puede admitir que ellos puedan hacer lo que quieran con nuestras creencias en sus países, pero exijan ser una religión con privilegios en los nuestros.

Amparados en nuestras leyes inclusive les hacen una
demanda legal a la Cárcel de Pierce County (USA) porque no se "respeta" adecuadamente el ejercicio de su religión dentro de la cárcel. Comparen esto con el artículo de Pipes, es increíble.

Ellos queman Biblias, las usan ofensivamente, matan gente, hacen manifestaciones, amenazan con la muerte a quienes los critican y el mundo civilizado aún no toma conciencia de esta asimetría en la forma de librar esta guerra que ellos han emprendido, ni actúa en consecuencia.

Dice Pipes:

"Más tarde, en 1989, el ayatolá Jomeini amplió de golpe este doble rasero hacia Occidente al decretar que el novelista británico Salman Rushdie fuera ejecutado bajo cargos de blasfemias en su obra, "Los versos satánicos". Con este acto, Jomeini impuso la Ley de Rushdie, que sigue estando en vigor. Estipula que quien se oponga ´al islam, al Profeta o al Corán´ puede ser ejecutado; que cualquier pariente del blasfemo también tiene que ser ejecutado; y que todos los musulmanes deben ser partícipes de una red oficiosa de Inteligencia destinada a cumplir esta amenaza."

No hay forma de que podamos defender a los musulmanes pacíficos, de evitar la discriminación contra todos ellos, de no permitir que crezca la desgraciada "islamofobia", en la medida que no se combata con una ley específica que impida que los fanáticos actúen a sus anchas en los países no musulmanes. Y sólo puede hacerse civilizadamente, por nosotros y por los musulmanes que no tienen nada que ver con estos salvajes. Es comprensible que ni siquiera los que comparten esa fe pueden abrir la boca ante tanta violencia.

Ellos pueden no respetarnos en sus países, nada podemos exigirles y las autoridades allí se los permite, pero no pueden impedir que actuemos con reciprocidad por medio de la ley, si no lo hacemos es porque la violencia nos ha amedrentado tanto como para que no hagamos nada para que la interrelación sea más justa.

La falsa convicción que nuestras leyes tal como están son suficientes para combatirlos es el suicidio de nuestra civilización. Las leyes son obra del hombre que las debe mejorar para enfrentar las nuevas situaciones, es hora que nos decidamos a cambiarlas.

ANA


ARTÍCULO RECOMENDADO:

PIPES:
LA LEY DE RUSHDIE LLEGA A FLORIDA-21/09/10

WASHINGTON TIMES

miércoles, 22 de septiembre de 2010

675 - PEREDNIK - AUDIO SOBRE EL ESTADO JUDÍO


DOS ESTADOS PARA DOS PUEBLOS (MUY RECOMENDADO)


Gustavo Perednik habló en su columna semanal por Radio Jai desde una Sucá en Israel sobre un debate muy importante en Medio Oriente y uno de los temas más relevantes para Israel sobre "dos estados para dos pueblos", el cual trajo repercusiones entre los dirigentes israelíes y palestinos, ya que no quieren reconocer a Israel como Estado judío.

Escuche la columna

FUENTE:
RADIO JAI-PEREDNIK-ESTADO JUDÍO-22/09/10

COMENTARIO:

Un tema esencial si queremos comprender los múltiples obstáculos a superar para obtener un progreso en las conversaciones de paz, pero partiendo de este reconocimiento. Y por todo lo que significa, se hace tan difícil que los palestinos lo acepten. Es muy importante escuchar esta explicación.

674 - MAISULS - DECLARACIONES ÁRABES


LA PAZ Y EL JUDENREIN (MUY RECOMENDADO)

Los palestinos tienen que reconocer el derecho a la existencia del Estado de Israel

Por Dr. GUIDO MAISULS


Los obstáculos para la paz son todos aquellos estados sociológicos y psicológicos, escenarios adversos, situaciones complejas, controvertidos personajes y tenebrosas filosofías que causan verdaderos impedimentos, barreras o estorbos para arribar a la tan esquiva y añorada Paz en este complejo Medio Oriente.

“Judenfrei y Judenrein”

“Judenfrei”, el término que en idioma alemán significa “libre de judíos”, fue empleado en la Alemania nazi durante el Holocausto para denominar una determinada zona libre de presencia judía.

Mientras, el término “Judenrein” o “limpio de judíos” tenía una connotación mucho más concreta y definida: que toda la presencia judía fuera eliminada como “una indeseada impureza entre los pueblo arios”.

“La Autoridad Palestina (AP) nunca reconocerá a Israel como Estado judío”.

Del negociador palestino Nabil Shath, una semana después que el primer ministro Biniamín Netaniahu y el presidente de la AP, Mahmud Abás, iniciaran conversaciones directas de Paz.

La Liga Árabe

“No reconoceremos al Estado Judío”.

Mientras la Unión Europea (UE) e Hillary Clinton exigen a Israel prolongar el congelamiento de la construcción en Judea y Samaria, el secretario general de la Liga Árabe, Amro Musa, reveló que los ministros de la Liga aprobaron la negativa de los países árabes a reconocer a Israel como Estado Judío.

La Autoridad Palestina

La inefable Autoridad Palestina alerta a los hombres de buena voluntad: “El mundo debe evitar la judaización de Jerusalén”. Su presidente Abu Mazen nos advierte: “Los judíos están controlando Jerusalén. Los palestinos y el mundo árabe deben movilizarse para defender Al-Aksa y evitar que los judíos y sionistas de todo el mundo dominen la ciudad comprando casas y tierras”.

“¿Qué se supone que significa un Estado Judío? Pueden llamarlo como quieran pero yo no lo acepto y lo digo públicamente: todo lo que sé es que hay un Estado de Israel en las fronteras de 1967, ni un centímetro más ni un centímetro menos. Cualquier otra cosa, no lo acepto”.

Mahmud Abás, más conocido por su nombre de guerra Abu Mazen.

“Pacto de Hamás”

Preámbulo: “Israel existirá y continuará existiendo hasta que el Islam lo destruya, de la misma manera que ha destruido a otros en el pasado”

Diccionario de terrorismo, página 246.

Artículo 7: “No vendrá el Día del Juicio hasta que los musulmanes combatan a los judíos, hasta que los judíos se escondan tras las montañas y los árboles, los cuales gritarán: '¡Oh, musulmán! Un judío se esconde detrás mío, ¡ven y mátalo!”'

Carta fundacional o “Pacto de Hamás” publicada el 18 de agosto de 1988.

Organización terrorista Hizbollah

“Estoy contra cualquier reconciliación con Israel. Incluso no reconozco la presencia de un Estado que se llame Israel. Considero su presencia injusta e ilegal. Si el Líbano acepta un acuerdo de paz con Israel y trae ese acuerdo al Parlamento, nuestros diputados lo rechazarán; Hizbollah rechaza cualquier conciliación con Israel”

“No hay solución al conflicto en esta región excepto con la desaparición de Israel”.

“El establecimiento de la paz si cambiara la realidad, que es Israel el enemigo y nunca será un vecino o una nación”.

“Los judíos inventaron la leyenda de las atrocidades nazis... ”

Hasán Nasrallah: secretario general de la organización terrorista Hizbollah.

El canciller egipcio

“Israel quiere llamarse a sí mismo un Estado Judío o Hebreo. Esto es preocupante”.

Canciller egipcio Ahmed Aboul Gheit a la cadena de televisión al-Arabiya.

Republica Islámica de Irán

“Irán ha producido hasta ahora unos 2.800 kilos de uranio poco enriquecido -1/000 kilos más que en noviembre pasado-, cantidad que los expertos consideran suficiente para fabricar entre dos y tres bombas nucleares”.

Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).

“Irán no ofrece la cooperación necesaria para permitir al organismo confirmar que todos sus materiales nucleares son destinados a actividades pacíficas”.

Del director general del OIEA, el japonés Yukiya Amano.

Trece grupos terroristas unidos

Trece grupos terroristas palestinos se unieron para lanzar “ataques más efectivos” contra Israel.

“Hemos decidido crear un centro de coordinación de nuestras operaciones contra el enemigo israelí. Queremos golpear al enemigo sionista en todo lugar y en cualquier momento”.

Abu Obeidah, portavoz de Ezzedine al-Qassam, brazo armado de Hamás, en nombre de los 13 grupos.

Muamar Kadafi, líder libio

En su visita a Roma para disertar en un seminario sobre el Corán a unas 500 jóvenes: “El Islam tiene que convertirse en la religión de toda Europa”.

Del líder libio Muamar Kadafi.

Control de armas nucleares

“A principios de este año, Irán ha producido suficiente uranio poco enriquecido para alimentar dos armas nucleares, si el uranio es enriquecido nuevamente a un grado armamentista. Por ahora, Irán ha añadido casi suficiente de este uranio poco enriquecido para componer una tercer bomba, y para mediados del próximo año (en la tasa de producción actual), es probable que produzcan lo suficiente para alimentar una cuarto bomba atómica”. “Todo esto sucede en un momento en que Irán está testeando con éxito misiles balísticos que pueden transportar una carga nuclear lo suficientemente lejos como para llegar a Israel”.

Profesor Gary Milhollin, director del Proyecto Wisconsin sobre Control de Armas Nucleares. The Atlantic.

Más armas para Medio Oriente

Rusia venderá a Siria misiles cruceros supersónicos P-800 Yakhont anti buques.

Expresiones del Ministro de Defensa ruso, Anatoly Serdyukov.

Turquía e Irán enviarán nuevas y sofisticados armas y cohetes al Líbano y a Hizbollah.

Del encuentro entre el jefe de Inteligencia turca Hakan Fidan y su colega iraní, Hossein Taeb.

“El Holocausto es una superstición”

El gran ayatola iraní Nasser Makarem-Shirazi, a dúo con el presidente iraní Mahmud Ahmadineyad en la negación del Holocausto.

“La verdad sobre el Holocausto no es clara, y cuando los investigadores quieren determinar si (el evento) es verdad o si los judíos lo han inventado para verse como víctimas, son encarcelados. Los americanos y los occidentales se ven afectados por esa superstición de reciente aparición como el Holocausto”.

“La paz depende del reconocimiento del Estado de Israel”. “Es muy difícil conseguir la paz si una de las partes con la que estás negociando niega tu existencia”. “Deseo, como todos deseamos, que estas conversaciones sean un éxito, pero ese éxito sólo se puede producir cuando una de las partes, los palestinos, tienen que reconocer sin duda ninguna el derecho a la existencia y a la seguridad al Estado de Israel”.

Del ex presidente del Gobierno español José María Aznar.

“Podrán cortar todas las flores pero no podrán detener la primavera”.


Pablo Neruda.

FUENTE:
AURORA-MAISULS-JUDENREIN-21/09/10

COMENTARIO:

Esta recopilación de las declaraciones de palestinos y árabes en general ahorra mucha lectura y nos explica de qué se trata este supuesto proceso de paz. Se trata de apaciguarlos a costa de los derechos de Israel a su supervivencia como estado soberano, judío y a resguardo de futuros ataques si cediera su seguridad para conformarlos.

El adalid de este despropósito es el Presidente de Estados Unidos que quiere un acuerdo cuando no hay razón alguna para que la dirigencia palestina haya dejado atrás su verdadero objetivo que es la destrucción de Israel. Si no puede ser por un ataque directo, será a través del permanente hostigamiento en todos los organismos internacionales que nunca tendrá fin hasta conseguirlo. Y mientras la comunidad internacional los ayude de manera desmesurada e incomprensible, como a ninguna otra población en el mundo, ellos no cejarán en sus ambiciones.

La lucha del islam por la dominación del mundo es eterna, la de los árabes por echar a Israel también, nunca lo aceptarán.

Si supuestamente un Abbas obligado lo hiciera, eso no significaría que todos las otras organizaciones dejaran de combatir a Israel, además, él no puede enfrentarse a ellas, sus días estarían contados. Esto explica los tumultos de hoy en Jerusalén, una forma de interrumpir las conversaciones con un muerto como excusa, para ellos es un mártir y el mártir está encantado de serlo, sólo tiraba piedras, que como se ve en las fotos de abajo, también matan.

Después de leer esta recopilación ¿es posible que alguien tenga dudas sobre la imposibilidad de un acuerdo de paz ahora? Si dejaran de apoyar a esta dirigencia palestina el pueblo palestino les estaría agradecido, por fin tendrían un futuro de cooperación con sus vecinos israelíes, que no desean más que vivir en paz en su tierra.

Pero quizá es demasiado pedir un poco de cordura y realismo en un mundo dispuesto a sacrificar al estado que ellos mismos legitimaron, cuando sólo tienen en cuenta sus propios intereses.


ANA






martes, 21 de septiembre de 2010

673 - CALDERÓN - LA PAZ FORZADA DE OBAMA


"LOS RIESGOS ESTIMADOS PARA ISRAEL SON MUY ALTOS"

Por HORACIO CALDERÓN

El renovado proceso de paz bajo la óptica argentina.


El analista argentino Horacio Calderón en diversas oportunidades manifestó su pesimismo con relación al proceso de paz en Oriente Medio. Analiza fríamente la situación y emite sus opiniones en base a un amplio conocimiento de lo que sucede y a una lectura de los acontecimientos según lo que se desprende de los propios protagonistas.

A continuación, algunas de sus evaluaciones.

*Sobre si la cumbre podría arrojar un resultado exitoso.

Lamentablemente no, al margen de una foto para Barack Obama, y cabría decir que muy forzada en este caso tanto para israelíes como para palestinos. Estas "conversaciones de paz” entre Israel y la AP no son el resultado de un proceso natural de aproximación impulsado por actores como Egipto y Jordania, sino el de una serie de presiones insoportables del mismo Obama, que necesita mostrar algún tipo de éxito en materia de política exterior, frente a las elecciones de noviembre y a los desastres que enfrenta en Irak y Afganistán. De ahí las presiones para que se concrete esa convocatoria en Washington, D.C. El presidente parece no entender que su voluntarismo y vacua retórica no pueden conducir a resultados concretos, si se trata de solucionar conflictos de tan larga data en el Levante y el Medio Oriente.

Debe destacarse además que el premier Biniamín Netaniahu y el presidente Mahmud Abás tienen una muy escasa capacidad de maniobra dada la fragilidad de sus coaliciones. Es que una mínima concesión a la otra parte podría provocar la caída de sus gobiernos.

En consecuencia, la resolución de los puntos más sensibles en cuestión, como el trazado definitivo de límites, el retorno de los refugiados, el estatuto final de Jerusalén, los asentamientos en Cisjordania, el control de las fuentes y distribución de aguas y todo lo vinculado a la seguridad, tienen una muy baja probabilidad de ocurrencia y no sólo en los plazos que pretende Obama sino en un futuro previsible.

Pero no hay que olvidarse que los territorios palestinos están divididos en dos: Cisjordania y Gaza, separados por territorio israelí y que ni Hamás ni Al-Fatah, dividida en cinco partes, tiene asegurado su futuro.

*Sobre la posición de Hamás.

“Durante un viaje a los territorios palestinos, poco antes de su ruptura, pude confirmar in situ que las diferencias entre ambos movimientos son irreconciliables. Hamás siempre será un obstáculo para cualquier proyecto que no coincida con su agenda, que no es fundar un Estado palestino, sino un emirato islamista regional que incluya a Egipto desde Gaza y a Jordania desde Cisjordania. Debe tenerse en cuenta que Hamás es la rama palestina de la Hermandad Musulmana egipcia. De ahí el primerísimo nivel de importancia de Egipto y Jordania en las negociaciones y por qué han sido invitados -para la foto de Obama- el presidente Mubarak y el rey Abdalá II, jefes de Estado de ambos países, respectivamente.

*Sobre qué pasa tras la cumbre.

¿Después de la foto? Muy poco, si no nada, aunque tal vez por un tiempo podría presentarse como que fue un hito en el camino hacia la paz, porque esta especie de “fiesta” conviene a todas las partes, para ganar tiempo, por diferentes razones. El Medio Oriente parece tener un piso de pólvora, y una chispa podría conducir a una conflagración mayor…”.

*Sobre el conflicto por los asentamientos.

Uno de los puntos más sensibles en litigio que figuró en la agenda de la reciente cumbre. En este momento hay cerca de medio millón de colonos judíos viviendo en más de 100 asentamientos desde que Israel ocupó esos territorios luego de la Guerra de los Seis Días de 1967. Tanto la ocupación de esas zonas como la construcción de asentamientos son consideradas ilegales de acuerdo a la ley internacional, pero Israel nunca aceptó cumplir con ello. Justamente se vence a fines de septiembre el congelamiento de las construcciones y Netaniahu va a tener que ejercer una enorme presión sobre sus aliados para lograr una extensión del plazo. Y hablo de ampliación de plazos, no de terminar definitivamente con tales construcciones, que sería improbable sin que termine desintegrada la alianza gobernante. Ahora, si es altamente difícil si no imposible congelar las construcciones, sería mejor no imaginar el escenario al que podría desembocarse si se intentara evacuar a los colonos judíos de las zonas en litigio, o ponerlas bajo soberanía de un futuro Estado palestino.

Por otra parte, no debería siquiera imaginarse a un Gobierno israelí intentando imponer por la fuerza un plan como el de Gaza; que además de suscitar un grave conflicto religioso y por extensión político y militar, sería una catástrofe económica para el país. Y menos imaginable sería que ese medio millón de colonos decidiera evacuar voluntariamente lo que por razones religiosas consideran una tierra sagrada, por más que la ley internacional dicte lo contrario.

Tal vez lo más viable sería un intercambio de territorios, porque de eso se ha hablado, pero por múltiples causas cuenta con pocas probabilidades, ya que los sectores más intransigentes del sector palestino (“Jihad Islámica de Palestina”, etc.) difícilmente acepten este tipo de soluciones.

FUENTE:
AURORA-CALDERÓN-RIESGOS DE ISRAEL-21/09/10

COMENTARIO:

Aunque este artículo sea desalentador nos pinta la realidad de un proceso de paz obligado y manejarse con la verdad tiene el aspecto positivo de que se puede buscar una solución real porque se basaría en realidades y no fantasías. Nadie tiene confianza en que puedan llegar a algo concreto porque ninguno puede conformar las exigencias del otro, pero no han podido rehusarse para no ser considerados como la parte que no desea llegar a un acuerdo.

Hay tantos temas que quedan sin resolver que pretender que se llegue a algún tipo de acuerdo ahora es ilusorio. Israel no está eligiendo, no tiene más remedio que ser firme por las experiencias pasadas, cada vez que cedió lo pagó con vidas y su gente sabe que ceder nuevamente no les dará ningún beneficio.

Si Israel ocupó tierras es para obtener algo a cambio de ellas, pero lo más fácil para la dirigencia palestina es negarse a todo y retomar lo que arriesgó sin ofrecer nada a cambio, ni siquiera reconocería a Israel como el estado soberano que es. Parecería que las leyes internacionales deben ser aplicadas a Israel cuando venció y no a Jordania y Egipto cuando atacaron, ocuparon, arriesgaron y perdieron.

Mientras se siga manteniendo a esta dirigencia palestina como si tuviera alguna razón para sus pretensiones, no hay posibilidades de un entendimiento realista y conveniente para ambas partes.

Por otro lado, la función de los asentamientos está bien explicada en el
Post Nº 413, que recomiendo leer.

Ahora Lieberman está proponiendo el
intercambio de tierras y poblaciones, sería una buena idea si se encontrara a algún palestino que viviendo y disfrutando la democracia israelí estuviera a dispuesto a vivir bajo un gobierno palestino. Ese es el primer inconveniente que se presentaría si la propuesta tuviera éxito.

Israel está en riesgo, por supuesto, con todo el mundo en contra difícilmente puede pensarse que hay una solución a la vista que no signifique su debilitamiento, pero hace lo que cualquier país haría si estuviera en su lugar. Lamentablemente solamente hay un Israel, no hay forma de compararlo con cualquier otro país.

Por eso el ensañamiento, se puede ser injusto sin tener que rendir cuentas por la doble moral con que se lo trata.

ANA


¡BIENVENIDO PASTOR!


lunes, 20 de septiembre de 2010

672 - SCHVINDLERMAN Y LOS PREJUICIOS


LA LEGITIMIDAD DE ISRAEL

Por JULIÁN SCHVINDLERMAN

Ningún Estado en la actualidad está siendo amenazado como el Estado de Israel lo está. Sobre él recaen regularmente fatuas genocidas emitidas por jeques islámicos radicales, su bandera es quemada en manifestaciones desde Gaza hasta Islamabad, son vociferados llamados a su destrucción por parte de un Estado–miembro de la ONU (la República Islámica de Irán), y en los últimos años solamente ha sido víctima de una cantidad tal de atentados terroristas y ataques con cohetes que hacen de su seguridad nacional la pesadilla de cualquier estratega. Israel vive bajo permanente estado de asedio psicológico y militar.

Y sin embargo, Israel es la nación más incomprendida del mundo… y la más condenada. Sólo a Israel –el único Estado judío entre 200 en el globo– se le cuestiona su derecho a existir, y sólo a esa pequeña nación se la interroga continuamente a propósito de su legitimidad.

Ningún otro país es tan cotidianamente comparado al colonialismo europeo, a la Sudáfrica del apartheid, incluso a la Alemania nazi. Esto conlleva a su aislamiento global.

Al presentar al Estado israelí como un estado paria más allá de toda civilidad, se lo ubica en oposición a la opinión pública mundial. Pues ¿quién toleraría a un país que se comporte conforme a las ideologías más atroces del siglo XX?

En consecuencia, resultará vital clarificar acerca de la naturaleza de Israel, su historia y su presente. Como las restricciones de espacio atentan contra esta mayúscula empresa, limitémonos a postular lo siguiente. Si Israel fuese un Estado apartheid, ¿cómo se explica la existencia de diputados árabes en su Parlamento? ¿De académicos y estudiantes árabes en sus universidades? ¿De jueces árabes en su Corte Suprema? ¿Incluso de miembros árabes en el Gabinete nacional? ¿Acaso son las mezquitas e iglesias árabes de Israel profanadas y sus poblados atacados? En rigor, la población árabe de Israel goza de mayores libertades políticas y derechos civiles que sus hermanos árabes en países de mayoría y gobierno árabes.

Si Israel fue un producto del colonialismo europeo para servir de frente a sus intereses en el Medio Oriente, ¿entonces por qué arrestó y ahorcó la Oficina Colonial británica a combatientes sionistas en la lucha independentista? ¿Por qué impuso Gran Bretaña restricciones a la inmigración judía a Palestina, llegando incluso a retornar barcos de refugiados judíos al infierno nazi? Si el Estado judío era una lanza colonial ¿por qué se abstuvo Londres en la votación de la ONU que validó el establecimiento de Israel en 1947? En rigor, los pioneros judíos que labraron la tierra en Palestina, secaron pantanos, trazaron redes eléctricas, construyeron escuelas y hospitales, museos y orquestas musicales, no estaban al servicio de ningún imperio.

Si Israel fuese un ente nazi, ¿no deberíamos estar viendo a los árabes y a los palestinos ser arrancados de sus hogares y enviados en trenes a campos de exterminio? ¿No debiéramos oír de selecciones, ejecuciones, fosas comunes, y gaseamientos? ¿No debiéramos ver cotidianamente pogromos antiárabes y multitudinarias manifestaciones callejeras israelíes clamando por el aniquilamiento de la minoría árabe y de la población palestina? En rigor, la acusación es tan descabellada que el intento de refutarla luce indigno.

La creación de Israel en 1948 fue justificada, como lo es su preservación como un Estado judío en la actualidad. Israel es el único Estado no árabe-musulmán en una región habitada por una veintena de estados árabes (más la Autoridad Palestina), y si nos extendemos más hacia el Oriente hallaremos otros 37 estados islámicos no-árabes en los cuales los musulmanes han podido ejercitar su derecho a la autodeterminación nacional.

Quien se manifieste a favor de la autodeterminación nacional de los musulmanes (y de los demás pueblos) menos el judío, claramente está incurriendo en un acto discriminatorio, y como tal acto discrimina negativamente contra los judíos, resulta incuestionable que es un acto basado en un prejuicio.

Israel deriva su legitimidad de la conexión histórica del pueblo judío con la Tierra de Israel –respaldada jurídicamente mediante el reconocimiento extendido por las Naciones Unidas al momento de su fundación como estado moderno– y, en palabras de José María Aznar, “del mismo derecho a la autodeterminación nacional reclamado por todas las naciones”.

FUENTE:
SCHVINDLERMAN-LEGITIMIDAD-17/07/10

LA PRENSA (PANAMÁ)

COMENTARIO:

Cuando no se tiene razón se apela a la fuerza, esto es lo que está pasando entre Israel y la dirigencia palestina. Israel fue atacado desde el mismo momento de su creación como estado, contrariando lo que habían decidido los organismos internacionales. Los mismos que en lugar de ayudar a un estado legitimado por ellos lo abandonó a su suerte, pero desde entonces siempre venció a sus agresores, hasta el día de hoy. La fuerza tampoco sirvió para derrotarlo. Schvindlerman explica con argumentos irrefutables las falsedad de las acusaciones que se esgrimen para justificar el acoso permanente que sufre Israel.

Lo que no se puede entender es por qué la comunidad internacional toma partido en contra de Israel, esto siempre será algo imposible de asimilar. Si no fuera así, no habría guerra en Medio Oriente, no habría una dirigencia palestina que es mantenida por los desinformados contribuyentes de todo el mundo en un grado que no se puede comparar con la ayuda que reciben otros pueblos mucho más necesitados que los palestinos.

Uno se pregunta si todo esto no será obra de un poder maquiavélico para vender armas, si el antisemitismo es todavía tan fuerte, si es por la necesidad de no enemistarse con quienes proveen de petróleo al mundo, todos países que apoyan a la dirigencia palestina que no ceja en su pretensión de echar a los judíos de su patria. Nada puede explicarlo, pero lamentablemente Israel sigue teniendo mala prensa, sufre boicots y es difamado fácilmente, la opinión pública se guía por los titulares. Si no hubiera guerra en Medio Oriente ¿qué otro titular mejor atraparía la atención de un lector para que comprara la revista
"Time", por ejemplo?

Mucha gente importante toma partido por Israel y ayuda con su presencia y declaraciones, pero es el pueblo israelí quien pone el cuerpo y trabaja duramente para mantenerse fuerte y capaz de resistir los ataques. Sin embargo, esta guerra dejaría de existir si la opinión pública supiera a dónde va a parar el dinero de sus impuestos, esa es la guerra que hay que ganar, la del esclarecimiento.

Sólo es necesario que la gente sepa escuchar las razones de Israel y las sinrazones de la dirigencia palestina que ni siquiera tiene compasión por su propio pueblo.

ANA