sábado, 2 de mayo de 2015

1462 - STEINER - MUSULMANES Y SU EXPANSIÓN EN EL MUNDO


LA OLEADA SILENCIOSA

Por NATALIO STEINER, co-director de Comunidades

Los líderes del mundo occidental se desentienden de los lineamientos básicos del islam radical que se encuentra en franca expansión en los últimos años.

Para esta ideología agresiva todo lugar que históricamente alguna vez el islam hizo pie pero lo perdió, debe ser recuperado. En esta categoría se encontraría España, Creta, Malta, Zanzíbar, parte de África, parte de la India, Filipinas, Los Balcanes, el Cáucaso y por supuesto Israel. El segundo punto es que todo esto es voluntad de Alá y por ello en nada se puede ser concesivo. El tercer punto es amenazar con guerras en nombre de la religión para así desmoralizar al Occidente pacifista. El último punto es que todo lugar "liberado" por el Islam, cristianos y judíos serán minorías "respetadas" a cambio del pago de un impuesto (Gizia).

El dictador de Libia, Muhamar Khaddafy, dijo un tiempo antes de su muerte que no hacía falta del terrorismo para expandir el Islam. En algunos años el Islam conquistará Europa sin ayuda de las armas. Sus 41 años de dictadura le sirvieron de crédito a sus palabras. De acuerdo a datos oficiales el promedio de nacimiento de niños europeos es de 1,38 hijo por familia. El promedio del musulmán que vive en Europa supera los 6 hijos por familia. No parecen lejanos los días que el dictador libio vaticino

España y Francia deben estar más que preocupadas. En el sur de Francia (allí donde Carlos Martel derrotó a los árabes en el medioevo) el número de mezquitas supera a las iglesias. España fue ocupada por el Islam por 700 años. Las ambiciones islámicas tienen hoy bases firmes en el sur de España y otras regiones.Ya hay mas de 1.100 mezquitas en el país.

55.000.000 de musulmanes viven hoy en Europa y unos cuantos miles entran por año clandestinamente o legalmente desde el norte de Afrecha. Así es como de a poco, sin armas tradicionales, van conquistando el continente con esta guerra demográfica silenciosa.

Muchos extremistas islámicos entendieron que en Europa el terrorismo entorpece sus objetivos. Lo efectivo es usar contra Europa sus propios beneficios que emanan de sus constituciones: igualdad, fraternidad, antidiscriminación.

Son valores que no les interesan a los islamistas pero sí les sirve para usarlos en contra de los ingenuos europeos.

El joven sociólogo francés de origen islámico, Mohamed Siwani, formuló la tendencia en un lenguaje claro y sincero. "Los europeos están cautivos de las banderas de los derechos humanos, banderas que siempre alzan. El Islam radicalizado aprovecha bien los privilegios concedidos. Las liberales leyes europeas no coinciden con las del Corán y los musulmanes no logran incorporarlas a sus pensamientos. No ven otra alternativa que dominar el continente.

La minoría islámica hoy en Europa no es más que un caballo de Troya".

Israel, como dique de contención del extremismo islámico en regiones vecinas a Europa, debe salir a explicar diplomáticamente acerca de las intenciones de la Jihad. Si espera hasta que otro lo haga en su lugar se perderá un tiempo decisivo. El extremismo islámico, por de pronto, ya tiene un emisarios activos en Isis y Alqueda.

Cambios en la política demográfica, en la política migratoria respecto de los refugiados, educación para el bienestar evitando la formación de guettos islámicos, occidentalización del mundo islámico; son todas ellas políticas que Europa debe llevar a cabo si quiere salvar los valores heredados de la revolución Francesa.

Ya no hay tiempo para seguir haciéndose los desentendidos.

FUENTE: COMUNIDADES-STEINER-MUSULMANES-ABRIL 2015

REFLEXIÓN:

Hay cosas que se pueden y deben hacer como los cambios en la política demográfica, en la política migratoria, educación y, sobre todo, evitar la formación de guetos islámicos.

Pero otras no se pueden lograr, como la occidentalización del mundo islámico, para que fuera posible los musulmanes deberían dejar de serlo: imposible.

Son dos culturas diferentes y opuestas. El islam dice qué hay que hacer en todos los aspectos de la vida, su religión pauta todas las conductas de un individuo a las que hay que obedecer y esa cultura la llevan con ellos adonde vayan. Quizá se vistan a la occidental, inclusive en sus países los vemos usando jeans por ejemplo, pero la mujer sigue teniendo un lugar secundario y debe someterse a la voluntad del hombre, los hijos son del hombre y todo musulmán debe cumplir con los mandatos en la forma de vivir su religión, comidas, rezos y todo lo que ella señala.

Este condicionamiento es contrario a la cultura de Occidente, por ejemplo, entre otras cuestiones, las religiones son respetadas y ninguna se impone a las demás, se considera una elección privada e íntima que no afecta a las demás; la mujer tiene prioridad con respecto a los hijos y está en pie de igualdad con el hombre. Una conquista relativamente reciente que la mujer islámica no tiene.

Por este condicionamiento del individuo a los mandatos de su religión algunos musulmanes consideran que el extremismo islámico no es aconsejable ni recomendable, con imponer y exigir el respeto a las leyes islámicas, como la Sharía y avanzar demográficamente, la democracia que practica Occidente le dará los votos suficientes como para imponer pacíficamente -con el tiempo- su cultura donde sean aceptados. Por el contrario, el extremismo violento pone a la gente en contra.

Por lo tanto, la única forma de detener esta invasión es cambiar las leyes occidentales de modo que la cultura islámica no pueda exigir privilegios que afectan a toda la sociedad hasta finalmente prevalecer por su número de votantes sobre la propia. O se adaptan y cumplen con su religión dentro de sus casas o deben volver a sus países de origen donde impera su cultura. A grandes males grandes remedios.

ANA

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario