viernes, 14 de noviembre de 2008

191 - UN MUNDO INCORREGIBLE


¿HASTA CUANDO LOS JUDÍOS DEBERÁN SEGUIR DISCULPÁNDOSE?


Da que pensar en qué mundo vivimos, si todavía los judíos deben pedir perdón por cada cosa que algún miembro de su comunidad dice y no importa si fue una declaración despectiva contra un pueblo con muy pocos logros, excepto que algunos de sus miembros tienen una gran capacidad de destrucción allí donde no se los detecte. Está mal que se diga, pero no deja de ser verdad.

El padre del principal colaborador de Obama hizo una declaración ofensiva y su hijo se apresuró a pedir disculpas por él. Y yo me pregunto por qué, si cada uno de nosotros debemos disculparnos por lo que hacen o dicen otros, por más cercanos que sean, por más alto que sea el cargo que ocupemos.

Así funciona el lobby árabe, pero después hablan del lobby judío. Parece que éste no tiene mucho éxito, porque si así fuera debería exigirles a muchos de sus encumbrados personajes que se disculpen por las atrocidades que dicen y hacen. Eso sería justo, pero tenemos que olvidarnos que este mundo ni se aproxima a ser ecuánime a la hora de considerar a Israel y a su pueblo dondequiera que esté.

Cada vez que Ahmadinejad, Nasrallah, Hamás y todos sus acólitos definen a los judíos como cerdos y monos, les enseñan a las nuevas generaciones a considerarlos menos que humanos o cuando atacan indiscriminadamente poblaciones israelíes, este mundo ¿les pide explicaciones? ¿Les exige que alguien se disculpe por ellos? No. Se los recibe en las Naciones Unidas, se los alimenta en Gaza, se le exige a Israel que los provea de combustible que será usado contra sus ciudades en lugar de aprovecharlo para su empobrecido pueblo. Presiden encuentros sobre racismo y xenofobia como Durban I y lo harán en Durban II cuando sus países son un modelo de lo que NO debe hacerse con la gente. Parece un chiste.

¿No es ya hora de preguntarnos qué queremos del pueblo judío y de su estado? Pero, ¿qué queremos? ¿Que sean un ejemplo de moral y buenas costumbres para todos? ¿Pretendemos que den la otra mejilla? ¿No se siente la injusticia que se comete contra ellos? A mi me parece que es tiempo de poner las cosas en su justo lugar. Todos somos seres humanos con virtudes y defectos, pero no pretendamos que "ellos" se comporten como seres de otro planeta nada más que por decir algunas verdades que nadie se atreve a decir. Respeta para ser respetado.

No, no creo que Emanuel debiera pedir disculpas por lo que dijo su padre, no creo que esa caterva de asesinos deban ser alimentados por occidente como si fueran disminuidos mentales, porque no lo son. Son tan inteligentes como cualquiera, pero usan sus capacidades para amedrentar a todo el mundo y tienen un lobby muy exitoso que obliga a un colaborador del próximo presidente de los Estados Unidos a pedir disculpas como si esas palabras las hubiera pronunciado él.

Los judíos ya se han acostumbrado a ser discriminados y siguen su camino, seguros de su destino de pueblo especial, un pueblo que debió ser como cualquier otro y que nosotros obligamos a ser "diferente". Y cómo no van a serlo si los tratamos "diferente", ya ni se indignan... pero cualquier persona común no puede dejar de ver estas injusticias que serían intolerables para cualquiera que no perteneciera a este pueblo, cuyo mayor pecado es no haberse dejado avasallar y seguir SIENDO.


6 comentarios:

  1. Gracias Morgana, a veces se pierde la paciencia, pero esto hay que decirlo y vernos como lo que somos, responsables por no mostrar la diferencia en cómo tratamos a unos y otros. Francamente, es vergonzoso.

    ResponderEliminar
  2. Extraordinario análisis, Ana, no había tenido la oportunidad de leerte y creo que merece ser expuesto, con tu permiso lo copio. Verdaderamente certera.

    ResponderEliminar
  3. Iojanan:

    Gracias, me encantará verlo en tu blog :-)))) Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Gracias Iojanan, te dije que me encantaría y lo lograste :-)))

    ResponderEliminar

Deja tu comentario