EL FUEGO SE PROPAGA EN AMBOS LADOS
Irán, Siria y Hezbollah
Por JONATHAN SPYER
No sólo el "Eje de Resistencia" de Irán no pudo sacar provecho de la Primavera Árabe, también se ha visto forzado a ponerse a la defensiva.
Antes de los disturbios árabes de 2011, el Medio Oriente estaba supeditado a una guerra fría, que enfrenta a Estados Unidos y sus aliados regionales contra el autodenominado "Eje de la Muqawama (Resistencia)", es decir, los movimientos y países liderados por Irán. Ambos bloques aún existen. Ambos han sido debilitados, de diferente manera, por la agitación en el mundo de habla árabe.
Al Eje de Resistencia de Irán le gustaba vanagloriarse como el auténtico representante de las fuerzas locales musulmanas, emplazado en contra de la corrupta y decadente alianza de colaboradores locales alineados con EE.UU. e Israel. Sin embargo, en oposición a su argumento preferido, varios elementos de este bloque se encuentran actualmente sitiados y amenazados por las fuerzas desatadas por la Primavera Árabe.
Esto no era lo que parecía al comienzo. Las dos primeras víctimas de la agitación de 2011 fueron los líderes árabes incondicionalmente pro-occidentales, Zine el-Abidine Ben Ali en Túnez, y Hosni Mubarak, en Egipto. La dirigencia iraní anunció, en su momento, el "Despertar Islámico" de toda la región. El presidente sirio, Bashar al Asad, explicó en una entrevista de gran influencia ofrecida al Wall Street Journal, el 31 de enero, que Siria y sus aliados permanecerían al margen de la agitación debido a su identificación con los deseos más profundos de los pueblos de la región, es decir, por su oposición a Occidente y el apoyo a los palestinos.
El eje de resistencia estaba ansioso de que la situación volviera a la normalidad para disfrutar de la misma viendo al bloque rival hacerse pedazos. Pero no ha resultado de esta manera.
El único país árabe miembro del Eje, el régimen de Asad en Siria, está en estos momentos luchando por su supervivencia. Lejos de permanecer inmune a los vientos de cambio, el dictador sirio está combatiendo a una creciente insurgencia sunita. Siria es un factor vital de la estrategia regional de Irán. Los iraníes esperan, una vez que EE.UU. se haya ido de Irak, construir una cadena ininterrumpida de países que lo apoyan desde la frontera iraní hasta el Mediterráneo.
Para mantener viva esta ambición, necesitan que la dictadura de Asad se mantenga en su lugar.
Consecuentemente, los iraníes están ocupados ayudando a Asad en la represión. Oficiales de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria y de las agencias de seguridad, encargadas de hacer cumplir la ley iraní, han sido identificados en Siria, ayudando a sofocar el levantamiento. Equipos sofisticados de espionaje han sido provistos. Testigos presenciales han informado de la presencia de francotiradores iraníes entre las fuerzas de represión.
Fuentes de la oposición siria afirman que milicianos chiíes del movimiento de Muqtada Sadr en Irak -aliado de Irán- y el grupo libanés Hezbollah, también están tomando parte en la represión.
Pero mientras que esta asistencia ha ayudado a mantener a Asad en el poder, de la misma manera está haciendo que Irán y sus aliados sean cada vez más odiados en todo el mundo árabe sunita. Esto es visible en el creciente aislamiento diplomático de Asad. Desde el punto de vista iraní, la desaparición de la imagen de la resistencia a los ojos de las masas árabes sunitas no es menos importante. El Eje de la Resistencia aparece actualmente resistiendo brutal y enérgicamente la voluntad de un pueblo árabe.
Las consecuentes declaraciones públicas de Teherán alentando la reforma e incluso tratando de contactar a la oposición son transparentes ejercicios de relaciones públicas. Irán está con Asad hasta el final.
La consecuencia más importante de este proceso es hasta ahora el intento de Hamás de desvincularse del bloque liderado por la República Islámica.
Hamás es una sucursal de los Hermanos Musulmanes. Se ha encontrado en los últimos meses frente a un escenario en el que sus anfitriones y patrocinadores -Damasco y Teherán- consuman la sangrienta represión de una rebelión en Siria, dirigida al menos en parte por sus correligionarios Hermanos Musulmanes. Esta es una situación insostenible para el grupo islamista palestino. Hamás fue siempre el suní que estaba de sobra en una alianza encabezada por un Estado chií y conformado mayoritariamente por fuerzas chiíes. Ahora quiere irse.
Por lo tanto, Hamás trata de alinearse. El nuevo patrocinador natural sería un Egipto dominado por los Hermanos Musulmanes. Esta es también su opción preferida, como lo demuestra el proceso de reconciliación auspiciado por El Cairo y el acuerdo mediado por el país del Nilo para liberar a Gilad Shalit. Irán está enfurecido pero no puede impedir este viraje.
La joya de la corona de Irán -el grupo libanés Hezbollah- también está sintiendo el frío. Refugiados sirios están encontrando el camino, en grandes números, a través de la frontera con el Líbano. El gobierno respaldado por Hezbollah sigue incondicionalmente apoyando al régimen de Asad. Las Fuerzas Armadas del Líbano están muy ocupadas deteniendo a los refugiados y opositores sirios. En un notable incidente, la semana pasada, los residentes locales de la ciudad de Arsal, en el valle de la Bekaa, impidieron físicamente que el ejército libanés detuviera a fugitivos sirios. Varios vehículos militares fueron quemados. El Movimiento del Futuro de la oposición, liderado por el ex primer ministro Hariri, celebró un gran mitin en la ciudad sunita de Trípoli. Fueron exhibidas pancartas contra Hezbollah, Asad e Irán.
El control físico del Líbano por parte de Hezbollah no está en riesgo, siempre y cuando Asad se mantenga en su puesto. Pero el movimiento está acumulando un resentimiento cada vez más grande por parte de los libaneses no chiíes, que bien podría tener consecuencias si el dictador sirio cae.
Por lo que el Eje de Resistencia ha sido vapuleado por una tormenta que sopla en toda la región. Al añadir a estos ejemplos el fracaso de no haber podido hacer ningún progreso real en el sostenimiento de la disidencia en Bahréin, o en la agitación en el este de Arabia Saudita, el resultado es un panorama un tanto sombrío.
Las misteriosas explosiones en las instalaciones de seguridad y las curiosas muertes de los científicos en las calles de Teherán no son alentadoras tampoco.
Irán y sus aliados, que sufren los embates de una guerra encubierta, no están teniendo éxito en transformar el "Despertar Islámico" en una ventaja. Los líderes de Irán y sus seguidores regionales son conscientes de ello y están preocupados.
Uno de los portavoces más elocuentes del Eje de la Resistencia, Ibrahim al-Amin, editor del periódico pro-Hezbollah, Al-Akhbar, describe actualmente al bloque encabezado por Irán como "focalizado en resistir la guerra de desgaste emprendida en su contra, se ha visto obligado a atrincherarse y defenderse de las amenazas". Sin embargo, prometió que Irán se está preparando para asumir un "nuevo papel regional."
Amin concluyó con característica grandilocuencia que "el fuego no puede ser detenido por los muros de acero o las fuerzas multinacionales". El Eje de Resistencia de Irán encabezado por Irán está descubriendo hoy en día, para su evidente consternación, que las llamas se propagan en ambos lados.
FUENTE: AURORA-SPYER-EL FUEGO SE PROPAGA-08/12/11
COMENTARIO:
Esclarecedor artículo al que nos tiene acostumbrados Spyer. Leerlo detenidamente nos da una idea bastante precisa de los cambios en la región que no son nada fácil de comprender.
-Rusia y China apoyan a Siria porque tienen grandes intereses y además no quieren que Occidente tenga influencia sobre ella como lo hizo con Libia. Este apoyo es lo más importante, no han aceptado que la OTAN intervenga en Siria como ocurrió en Libia.
-Siria sigue resistiendo porque Irán la respalda y Rusia le da armas defensivas a Irán para protegerse de un posible ataque israelí-norteamericano. Aquí es donde aparece la disputa por intereses entre Rusia y Occidente (Europa y Estados Unidos).
-Hezbollah (en Líbano) es chií, como lo es Irán, y la cúpula Siria es alauí (ahora aceptada por Irán como parte del chiísmo). Pero la mayoría de la población siria es suní y está harta de ser sometida por una minoría alauí.
-Hamás es suní pero está aliado con Siria y muchos de sus jefes actúan desde Siria, formando parte del eje que menciona Spyer: "Eje de la Muqawama (Resistencia)". Esos fueron los tiempos de Mubarak, con la Hermandad Musulmana (suní) de Egipto, sus mentores, bastante controlada y que no podía actuar, entonces Siria era la mejor opción para Hamás. Ahora las cosas irán cambiando si los HM se hacen del poder en Egipto y en condiciones de recibir a Hamás. Actualmente se ha detectado una instalación en el Sinaí de producción de misiles por parte de Hamás, Israel reclama a Egipto que controle la zona (Sinaí) que está a su cargo.
-En Líbano, el poder de los grupos no chiíes está muy acotado por Hezbollah, chií, aliado y agente de Irán en Líbano. Nasrallah no permite la entrada en Líbano a refugiados sirios porque sigue apoyando a Assad.
En este escenario aparece la "Primavera Árabe".
Irán, "wishful thinking", entendió que lo favorecía porque supuso que era contra el "imperialismo" de los infieles, sus enemigos. Pero se equivocó, en principio fue contra las dictaduras de sus gobiernos y está derivando en un movimiento suní liderado por los Hermanos Musulmanes (suníes), a veces con participación de Al-Qaeda.
Ante la muy probable caída del régimen de Siria -que parece inevitable- si las fuerzas armadas de Siria, cuya cúpula debe ser supuestamente alauí -leal al gobierno- aunque inevitablemente sus cuadros inferiores deben provenir del pueblo -que es suní- se decide derrocar al régimen, todo puede cambiar sin que sea necesaria la ayuda exterior de Occidente. A mi entender la deserción de cuadros militares sirios es imprescindible, sin parte de las fuerzas armadas a su favor y sin ayuda exterior como la tuvieron los libios, el pueblo suní sirio no puede ganar. Todos los días nos enteramos que hay deserción de sus cuadros inferiores y de sus jefes. Se resisten a seguir masacrando a su gente, los sirios suníes. Las matanzas siguen.
La inseguridad de Hamás (suní) en Siria, porque el gobierno sirio puede caer, y la posible protección de la Hermandad Musulmana (suní) en Egipto, ha hecho que Hamás vaya apartándose de Siria y busque una aceptación con el Egipto de la Hermandad Musulmana. Por otra parte, si se debilita la influencia del Hezbollah chií en Líbano, porque las alianzas del Eje se resquebrajan, se fortalece la oposición.
Es decir, hay un Medio Oriente en cambio, con las grandes potencias en pugna por el poder económico sobre estos países, alianzas que se deshacen porque en un principio la "Primavera Árabe" no respondió a las expectativas de nadie, aunque todos quieren apropiarse de ese descontento. Pero no se sabe cómo seguirá. La Plaza Tahrir en Egipto sigue reclamando cambios y no sabemos si los Hermanos Musulmanes harán a su gente, el pueblo egipcio suní, lo que Assad (alauí) ha sido capaz de hacer en Siria con el pueblo sirio suní. Pero el descontento de los "jóvenes de Facebook" y mucha gente que quiere una vida mejor, continúa.
Tropas del ejército de Estados Unidos que se retiran de Irak están apostándose en la frontera entre Siria y Jordania, ante un posible ataque sirio al Reino Hashemita, una forma de evitar que se encienda una chispa en la región. Irán propone a Arabia Saudita una alianza para enfrentar al "imperialismo", prometiéndole compartir sus avances tecnológicos en materia nuclear, pero sus intereses en la región son opuestos y difícilmente Arabia Saudita acepte. En estos días se produjo otro "accidente" en una fábrica de misiles, altos jefes de la Guardia Revolucionaria habían invitado al Ayatollah Khamenei a visitarla cuando se produjo. Murieron 17 personas entonces Khamenei hizo detener a quienes lo habían invitado para ser interrogados, inclusive a su propio hijo. Este es un indicio que quizá todos estos "accidentes" pueden provenir desde dentro de Irán, lo que no significa que no haya también interferencias externas.
Mientras, Irán sigue desafiando a Estados Unidos, hace ejercicios en el Estrecho de Ormuz para controlar y/o impedir el paso de los buques con petróleo, lo que si llegara a ocurrir sería para Estados Unidos cruzar la línea roja (o casus belli). Un 40% del petróleo del mundo pasa por allí, es como si quisiera realmente provocar un enfrentamiento regional. Ahora dice tener en su poder varios "drones" de procedencia norteamericana e israelí, los que exhibirá próximamente.
Religión y política, intereses económicos, la guerra que se trata de evitar, la posible proliferación nuclear en el resto de los países árabes suníes si Irán se sale con la suya. Así es Medio Oriente, una mezcla de política y sectas que se abrazan y se separan según la circunstancia. Excepto que suníes y chiíes siempre lucharán entre sí por el poder y ese enfrentamiento de tipo religioso que viene desde los comienzos del islam parecería ser central en el desarrollo de los acontecimientos futuros.
ANA
VIDEOS DE UNIVISIÓN: 09/12/11 - INTERESANTES
ANA
VIDEOS DE UNIVISIÓN: 09/12/11 - INTERESANTES
Documental La Amenaza Irani (Parte 1) (8.38 m) (09/12/11)
Excelente artículo, junto con los videos. Todos los días se agrega alguna señal en este sentido. Se lanzan cohetes sobre Israel con el fin de desestabilizar al Líbano.
ResponderEliminarResumiendo: muchos europeos temen una tercera guerra mundial, sin tomar conciencia de que la tercera guerra mundial comenzó con el derribo del World Trade Center. A partir de entonces, el islamismo sigue su camino sin tregua y sin pausa. ¡EUROPA, DESPIERTA!
Evelyn:
ResponderEliminarNo sé si empezar a publicar videos en inglés, a veces creo que debería hacerlo para quienes puedan entenderlo porque hay mucha información que no nos llega a los hispano parlantes. Es esclarecedora y debe ser conocida, no puedo traducir todo lo que veo y leo, sólo comentarlo, pero creo que los que más deberían tomar conciencia son los que entienden inglés. Todo está traducido en este idioma y la cosa está muy clara. El fanatismo de una religión está llevando a un enfrentamiento que no debería existir, excepto que, como en este caso, implica una política agresiva y dominante. Ahora Egipto tuvo nuevas elecciones y el salafismo, más agresivo que los Hermanos Musulmanes ha obtenido más votos. Si Egipto, junto con Irak, se vuelven países más fanatizados por la religión todo se pondrá peor. Todavía no entiendo a quiénes responden los que se siguen manifestando en la Plaza Tahrir, no sé si son fanáticos con la religión o si quieren simplemente más democracia y que se vayan los militares. No lo tengo claro todavía. Pero los han reprimido brutalmente. Creo que el indicio más claro de un cambio es la liberación de la mujer, cuando eso ocurra pensaré que hay un avance hacia la democracia, pero no es lo que está pasando en Medio Oriente. Spyer me gusta mucho, sus artículos son esclarecedores sin ser demasiado largos ni complicados. Y le da importancia al peso que tiene ser suní o chií, algo muy importante que yo destaqué en el comentario. Creo que eso es lo que enfrenta al mundo musulmán, pero entre ellos. Las posibles alianzas dividirán a Medio Oriente pero entre todos el objetivo final es instaurar el Califato Universal, no se fijan un tiempo, es una guerra eterna. Eso implica lucha, lo quiera o no Europa u Occidente en general. Creo que es cierto, la guerra hace rato que comenzó y no sabemos cómo pararla, una desgracia para todos. Muchos saludos.