miércoles, 26 de marzo de 2008

90. LA VIOLENCIA EN UN MUNDO GLOBALIZADO



OTRA OPCIÓN PARA UN MUNDO EN PERMANENTE GUERRA


Es válido preguntarse si el mundo seguirá siendo violento o si podemos tener esperanzas de que algún día los conflictos podrán resolverse mediante el diálogo, la comprensión mutua de los intereses de cada estado y la cooperación entre los pueblos.

Creo que las nacionalidades son inevitables e indiscutibles, cada pueblo tiene "su" forma de resolver los problemas, inclusive los puede definir de manera diferente, dándoles una jerarquía que responden a su cultura e idiosincrasia, aún en estos tiempos globalizados. Se trata de comprender al otro y respetarlo en su singularidad, lo que es importante para Bolivia no lo es para Islandia, por ejemplo.

Las palabras que pronunció Angela Merkel en Israel demuestran que no son los pueblos los que verdaderamente deciden, sino que son sus líderes quienes pueden guiarlos con inteligencia y sensibilidad hacia el entendimiento. ¿Quién hubiera dicho que presenciaríamos a la canciller alemana, en su idioma, dirigirse al pueblo que fue víctima de su país tan pocos años atrás, diciendo que precisamente esa tragedia de la humanidad los uniría para siempre? Y que fuera escuchada y respetada. ¿Tenían que pasar tantos años para que este acontecimiento ocurriera? ¿O sucedió porque se necesitaba a una mujer para que dijera lo que se debía, de modo que fuera posible recomenzar la relación entre dos pueblos separados por el horror del holocausto?

No sé si alguien dijo algo semejante antes, de los muchos que tuvieron responsabilidades en Europa durante ese suceso que ella calificó como una vergüenza para el pueblo alemán, es posible, pero a ella se le creyó. Esa es la diferencia. Lo más importante de lo que se dice es cómo se recibe el mensaje, uno le quita o agrega verdad según cuánto lo creamos. Con esta idea es que me quiero referir a quienes mienten bien, tan bien que sus pueblos les creen y los siguen hacia los desastres que hemos presenciado a lo largo de la historia.

Y porque existieron y de vez en cuando aparece un buen mentiroso que promete lo imposible, como el dominio del mundo, es que la verdad debe estar respaldada no sólo por la unión de los pueblos civilizados sino por la fuerza que sostiene a la razón. Es de esperar que esa fuerza sólo sirva como poder disuasorio y que la aspiración de los pueblos sea la de respetarse mutuamente para que jamás deba ser empleada.

No podemos ser optimistas, sabemos que hay problemas en China; Kosovo es y será un polvorín quien sabe durante cuanto tiempo, Israel sufre sin poder encontrar la fórmula para pacificar su territorio, en todos lados hay conflictos de difícil solución. Pero tengo una pregunta: ¿Si éste es el mundo donde han gobernado los hombres, no será la hora de que sean las mujeres las que puedan resolver el problema de la violencia? Las mujeres no usan la fuerza, están preparadas por la naturaleza para defender a la especie, para discutir, disuadir y emplear otras muchas "artes", la fuerza es patrimonio de los hombres.

Me pregunto sobre las mujeres de esos países que las condenan a las cuatro paredes de su casa... ¿Si se desarrollaran en un pie de igualdad con los hombres sabrían, con más lucidez, cómo acompañar a sus pueblos hacia un estadio más elevado para la supervivencia de sus hijos en lugar de sacrificarlos detrás de una quimera? Esta mirada sobre la violencia puede ser insólita pero me parece que es válida como para detenernos a pensar de dónde viene la violencia terrorista: ¿son mujeres las que la idean y ejecutan? ¿O son obra de un mundo gobernado solamente por hombres?

ANA

Artículo recomendado:

LOS MUSULMANES PACÍFICOS
Por Walter E. Williams
LIBERTAD DIGITAL
http://revista.libertaddigital.com/articulo.php/1276234459

2 comentarios:

  1. Lamentablemente Ana, esas mujeres de las que hablas no existen en el mundo musulmán, están eliminadas como fuerza social y además se las mantiene en un estado de analfabetismo expreso, con la idea permanente de evitar su evolución. Una sociedad que desprecia al 50% de su fuerza es una sociedad muerta y la musulmana lo es, por lo tanto, sin cultura, sin escuelas, sin apertura de mentes el islam no saldrá nunca del pozo en el que está por decisión propia. ¿Qué podemos esperar de mujeres que animan al suicidio a sus hijos con tal de matar a semejantes que sólo son diferentes por rezar a un Dios diferente?

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  2. Hola Iojanan, es cierto HOY lo que escribiste... para este presente. Pero el islam, como cualquier credo que se rige por sus escrituras, tiene muchas interpretaciones. Hay "otro" islam que lo hace de manera diferente a los que lo dominan actualmente, este es el punto en el que debemos cifrar nuestras esperanzas. Cualquier escritura que no se aggiorna a la Declaración de los Derechos Humanos está condenada por el resto de la humanidad, porque hemos evolucionado hacia un estadio superior donde el ser humano es respetado por encima de cualquier ideología política y religiosa. Sin duda les llevará mucho tiempo superar ese atraso y hará mucho daño todavía, pero ocurrirá indefectiblemente porque somos más los que sabemos amar y respetar al prójimo que los que sólo creen en una letra muerta, leída como se la escribió cientos de años atrás. Ninguna fe está exenta de ser mal interpretada, somos nosotros, los que elegimos lo valioso que cada una de ellas nos ofrece, quienes forjaremos un futuro mejor. Te invito a visitar una página: ISLAM.WATCH, y verás que hay quienes piensan diferente, a esos hay que apoyar. La igualdad de los sexos es indiscutible e ignorarlo quizá sea el bien más valioso que les impide avanzar. Tengo para mi que ningún privilegio se abandona por las buenas, nadie lo hace voluntariamente y para que lo pierdan hay que arrancárselo como sea. Lo que significa que llevará mucho tiempo y una gran lucha para las mujeres de ese mundo que se ha detenido en el tiempo, lo lograrán, pero necesitan de nuestra ayuda; la guerra se pierde inevitablemente sólo cuando se abandona la pelea. Aunque ese 50% no pueda tener conciencia, mujeres ignorantes y escondidas en un mundo oculto, sin duda se rebelarán porque nada detiene el progreso, ni la educación errónea, ni la violencia y ni siquiera el terror que paraliza. Mi esperanza está en este presente que nos obliga a pelear para vencer a esa locura que nos acosa, pero que también nos impone la obligación de rescatar a quienes están sumidos en la ignorancia que los anula como seres pensantes, libres de toda atadura a un pasado lejano y superado por la modernidad. ¿Parece una utopía? Lo es hoy, pero será una realidad en el futuro, como muchas otras que soñaron los que nos precedieron y que hoy nosotros disfrutamos. NADIE ELIGE LA ESCLAVITUD. Hay millones que nos están esperando, quizá algunos sin saberlo, pero desesperadamente.

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