75. ¿NUEVO "KOSOVO" EN TAILANDIA?

MARCHA EN TAILANDIA

Nueva protesta musulmana por las caricaturas de Mahoma

Cientos de manifestantes se congregaron frente a la Embajada de Dinamarca para rechazar una nueva publicación de los dibujos del profeta.

Cerca de 600 miembros del Grupo Musulmán para la Paz se congregaron frente a la sede diplomática exclamando "Alá es grande" y llamaron a boicotear los productos daneses.

Los manifestantes quemaron, además, una bandera danesa y fotos del primer ministro Anders Fogh Rasmussen y del caricaturista Kurt Westergaard, uno de los humoristas cuyos dibujos ofendieron a los musulmanes.

"Deberíamos hacer algo más violento que sólo protestar, pero hoy nos mantenemos pacíficos", dijo Suloh Salaimad, miembro de la agrupación.

Tailandia es un país mayoritariamente budista y en el que los musulmanes representan menos del 5 por ciento de la población. Pero son mayoría en tres provincias del sur: Narathiwat, Pattani y Yala, donde un movimiento separatista causó más de 2.700 muertos en los últimos tres años.

Diarios daneses publicaron a mediados de febrero, nuevamente, una controvertida caricatura del profeta Mahoma con una bomba en el turbante. La publicación fue en reacción al descubrimiento de un plan para asesinar al autor del dibujo. La reimpresión provocó fuertes protestas en el mundo islámico, tal como ocurrió hace más de dos años.

Fuente: RADIO JAI (Infobae - DPA) 12/03/08

COMENTARIO:

Para tomar conciencia e interpretar la conducta de un grupo religioso, un fenómeno que se está dando en muchas partes del mundo. Sus creyentes se agrupan donde se los admite hasta que finalmente se convierten en un movimiento separatista violento, posible porque sobrepasa en número a la población local. Así ocurrió en Kosovo donde se le está permitiendo independizarse en contra de lo que establecen las leyes internacionales. ¿Es la paz o la violencia el factor común en todas sus manifestaciones? La religión fundamentalista de Medio Oriente se expande por todo el mundo como cultura que aspira al dominio e imposición de sus leyes, repitiendo sus pretensiones separatistas sin posibilidad de acuerdo. Esto lo sabe bien Israel que padece sus embates y sufre la crítica universal cuando defiende su territorio, sus leyes y sus valores. Sin embargo, en todas partes presenciamos el diálogo entre una cultura evidentemente avasalladora y el resto, que pretende no ver esta particularidad que los diferencia.

(VER POSTS Nº 67 Y Nº 55)