domingo, 7 de noviembre de 2010

714 - BECHOR - RESULTADOS DEL ESTADO PALESTINO


AN OBSTACLE TO PEACE (ESPAÑOL)

UN OBSTÁCULO PARA LA PAZ


Op-Ed: Los árabes israelíes y los palestinos tienen intereses opuestos con respecto a un acuerdo de paz.

Por GUY BECHOR

(TRADUCIDO POR ANA)

Durante años, los líderes de la minoría árabe en Israel se han enorgullecido por estar a favor de un estado palestino y de una paz entre Israel y los palestinos. Sin embargo, cuando se examinan estas declaraciones ellas muestran lo opuesto. Las varias ramas del liderazgo árabe-israelí de hecho funcionan contra las aspiraciones palestinas por su independencia. Esta dirigencia no tiene interés en ver establecido un estado palestino.

Esto estuvo claro luego del estallido de la segunda Intifada, hace precisamente una década, cuando el liderazgo árabe israelí del Movimiento Islámico y desde la izquierda, enviaron a sus activistas a las calles en un intento por rebelarse contra el Estado de Israel. Por consiguiente y desde entonces, la opinión pública de Israel se ha endurecido con respecto a un acuerdo. ¿Los israelíes pueden estar de acuerdo con retirarse de los territorios, aún cuando un estado árabe surgirá dentro del mismo Israel, que es a donde ellos exactamente irán?

Las cosas sólo empeoraron y se complicaron más desde entonces hasta el punto en que Mahmoud Abbas, en uno de sus discursos más conocidos, reprendió a los árabes israelíes preguntando quien les pidió ayuda alguna vez durante la Intifada. Mientras tanto, los miembros árabes de la Knesset están adoptando un enfoque más radical que el de los palestinos con respecto a Israel y al futuro de las negociaciones.

Por ejemplo, cuando el Secretario General de la OLP Yasser Abed Rabbo insinuó el otro día que su grupo estaría dispuesto a reconocer la identidad judía de Israel bajo ciertas condiciones, Balad Zahalka (MK) rápidamente lo reprendió, e inclusive reclamó su despido, nada menos.

Frenando cualquier progreso

Mientras algunos líderes palestinos están dispuestos a discutir lo que se conoce como el "derecho al retorno", los miembros árabes israelíes de la Knesset no están dispuestos ni siquiera a oír de tal posibilidad. Ellos son más inflexibles que los palestinos, frenando así cualquier progreso hacia un estado palestino.

Los líderes de la minoría árabe de Israel no vacilaron en alabar a Gaddafi de Trípoli o Assad de Damasco, dos figuras que no son exactamente admiradoras de un estado palestino independiente. La rama norte del Movimiento Islámico en Israel esta en realidad más cerca de Hamás -el enemigo de la paz- que de la Autoridad Palestina. El Partido Balad, de la escuela de pensamiento Azmi Bishara, desprecia a la Autoridad Palestina debido a los acuerdos que ella firmó con Israel; está en duda si Balad siquiera la reconoce.

Por esto surge la siguiente pregunta: ¿Por qué la dirigencia árabe de Israel es más radical que la dirigencia de la AP?

Ya no hay un "puente hacia la paz"

Esta pregunta tiene dos respuestas sorprendentes. Primero, los frecuentes fuertes reclamos del mundo árabe a los árabes israelíes, que aparentemente traicionaron y se rindieron a los judíos, requiere que los árabes israelíes adopten un enfoque cada vez más provocativo hacia su propio país, Israel. Ellos deben demostrar que no son traidores con respecto al tema árabe y Palestina, sino que deben mostrarse más nacionalistas.

De modo tal que, paradójicamente, los así llamados "árabes de 1948" permanecerán atrapados para siempre en las feroces acusaciones árabes contra ellos. Estas acusaciones los define y, en vez de quitárselos de encima, los entierran cada vez más. Los palestinos no tienen nada que demostrar, mientras que los israelíes árabes si deben hacerlo.

La segunda respuesta es la siguiente: ¿Dónde exactamente serán ubicadas las decenas de miles de colonos si Cisjordania fuera evacuada? A Galilea y el Negev; es decir, a los centros de población árabe en Israel, a costa de los árabes.

Ahora podemos ver que los árabes israelíes y los Palestinos tienen intereses opuestos con respecto a un acuerdo palestino-israelí. El éxito de los palestinos puede demostrar ser desastroso para los árabes israelíes. Ha llegado el momento de exponer -tanto a los líderes de Israel como a la Autoridad Palestina- el papel que juegan los que alguna vez fueron considerados como "un puente para la paz."

FUENTE:
YNET-BECHOR-OBSTACLE TO PEACE-14/10/10

COMENTARIO:

Nada es tan fácil como se quiere suponer, los que más deberían ser un "puente para la paz", precisamente porque representan a los árabes palestinos dentro del Estado de Israel, y tienen un poder especial, legal, para actuar a favor de los derechos para obtener un Estado Palestino, son los que deben mostrarse más duros. Todo es muy complicado pero este artículo nos aclara por qué mientras la AP está obligada a tener conversaciones para ese propósito, los árabes palestinos están obligados a hacer lo contrario en lugar de buscar el éxito.

Quizá
la propuesta de Lieberman sea lo más razonable, "... Por ello, el principio rector para alcanzar un acuerdo estable no es territorios a cambio de paz, sino intercambio de territorios poblados."

No suena mal esto, quizá sería la solución menos conflictiva para todos, si es que todos quieren llegar a un acuerdo. Lo que no se sabe es si los árabes israelíes querrían de verdad estar bajo un gobierno palestino que, tarde o temprano, estará influido por la cultura árabe y con la sharía a cuestas, a menos que logren derrotar al Hamás, que ya la impuso en Gaza.

Pero raramente son los pueblos árabes quienes tienen la última palabra, sino sus dirigentes, a los que no les importa la sangre propia que deban derramar.

ANA


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario