sábado, 8 de octubre de 2011

929 - KEINON - ENTREVISTA A NETANYAHU - 28/09/11


SI LOS PALESTINOS QUIEREN VIVIR EN PAZ, SE PUEDE LOGRAR

Por HERB KEINON

Netanyahu se sienta con el ´Post´ para la entrevista por Rosh Hashana, en la que discute cómo es que Israel no esperará a que llegue la paz para construir el país.



Lo más llamativo sobre este encuentro, en su oficina en Jerusalén, en la tarde del lunes -unas cuatro horas luego que regresara de un extenuante viaje de cinco días a Nueva York- fue el grado en que no se veía, ni actuaba, como si apenas hubiera bajado de un vuelo transatlántico. Lucía relativamente fresco y sus palabras eran vigorizantes.

“Adrenalina”, dijo alguien en su oficina.

Pero era más que solo adrenalina. Siempre confiado, Netanyahu parecía algo animado, satisfecho que este viaje a EE.UU. -lanzado en medio de esas bajas expectativas de realmente cambiar algo en Naciones Unidas- había terminado como terminó.

Durante su viaje, Netanyahu escuchó un discurso cálido del Presidente estadounidense Barack Obama; transmitió un mensaje propio y articulado, que fue bien recibido en su país y fue testigo de la dificultad que los palestinos -gracias en parte a sus esfuerzos- estaban teniendo en reunir los votos necesarios en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para forzar el veto de EE.UU. a su declaración de estado.

Netanyhau, sentado en su escritorio, bajo una fotografía de Theodor Herzl, se cuidó de no regodearse ni sobre cómo fueron las cosas en Naciones Unidas, ni cómo su posición mejoró en las encuestas. Incluso, dijo en un punto, que con su experiencia comprende los flujos y reflujos de la vida política, y que no debería estar demasiado excitado en los momentos altos, ni demasiado desconcertado en los bajos.

Aunque los dos años y medio de gestión, y en vísperas de su tercer Rosh Hashaná en su cargo, Netanyahu cuenta con un grado de satisfacción en su actual situación. Su gobierno, a pesar de las masivas protestas de este verano, es seguro; el Presidente estadounidense está dando prueba de un grado de entendimiento para Israel que no mostró en el pasado; y el pronosticado “pan comido” palestino en Naciones Unidas, seguido por el temido “tsunami” diplomático -que dejó sola a la tercera Intifada- no se materializó.

Ciertamente, nada está avanzando con los palestinos. Pero eso -dice Netanyahu, y con sinceridad lo cree- es el resultado de su decisión, no de la nuestra. Y como los palestinos pierden el tiempo, e incluso Medio Oriente sobrelleva un malestar transformador, Israel continúa construyendo, creciendo, desarrollándose y fortificándose: “no es un lugar tan malo para estar”, dice, al pasar de 5771 a 5772.

Lo que sigue a continuación son extractos de la entrevista de Rosh Hashana al PM en el Jerusalem Post.


Septiembre está ahora detrás nuestro. El tsunami no llegó. El presidente de la AP Mahmoud Abbas dio su discurso y presentó su solicitud para una membresía completa ante el Consejo de Seguridad. Ud. dio su discurso. ¿Ahora qué? ¿Desde aquí, hacia donde vamos?

Deberíamos entrar en negociaciones directas. Esa siempre fue la idea. Que las partes negocien directamente una con otra, sin precondiciones. Israel siempre quiso eso, y anunció que esa era, desde el primer día, nuestra intención. Los palestinos lo evitaron; lo eludieron porque no quieren reconocer la nación estado del pueblo judío, abandonar el fantasma de los refugiados y darnos las condiciones de seguridad necesarias para la defensa de Israel.

Esas son las cosas en las que insistiré cuando sean reanudadas las negociaciones, y son las cosas correctas en las que insistir si vamos a tener una paz realista y duradera, más que una ficticia y efímera.


Lógicamente, ¿cómo quedará esto en los próximos días?

Es difícil decir que harán los palestinos. Dieron, una vez más, consistencia a la inmortal frase de Abba Eban de nunca perder la oportunidad de perder una oportunidad. Espero que demuestren que Eban se equivocaba.

Si Abbas continúa rechazando negociar, ¿consideraría -ante la solicitud americana- otro congelamiento en la construcción de los asentamientos? En una entrevista en EEUU, expresó que lo pensaría.

No. Dije que podría considerar la cuestión de los asentamientos (al menos eso es lo que quise decir). El tema de los asentamientos es una de las cuestiones que deberían discutirse en las negociaciones. Pero lo que los palestinos hicieron es elegir uno de los temas centrales finales y colocarlo, como precondición, al principio. Podría hacer lo mismo; lo podría plantear rehabilitando un campo de refugiados, lo podría hacer exigiendo el reconocimiento del estado judío.

Hasta ahora no lo hice porque quiero entablar negociaciones directas y no crear obstrucciones para que las inicien.

Los palestinos, retornando a la cuestión del congelamiento de asentamientos, indican que no quieren negociar. Y recuerden en una acción sin precedentes, que no fue fácil; les di casi un año de congelamiento de la nueva construcción de asentamientos. Eso no ayudó nada, ¿no es cierto? De manera que es un pretexto. Quiero decir, lo utilizan, una y otra vez, pero creo que mucha gente lo considera como un truco para evitar las negociaciones directas.


De manera que ¿no lo consideraría aun si eso fuera necesario para retomar el nuevo marco de conversaciones del Cuarteto?

Ya lo dijimos en el Gobierno.

Habló sobre desmantelar un campo de refugiados palestinos para mostrar que son serios acerca de abandonar el derecho de retorno a los refugiados. Eso lo mencionó durante una entrevista en EEUU. ¿Es una idea seria?

Realmente lo discutimos una vez: por qué no toman, en Balata, un par de calles cerca de Nablus, y las unen, y muestran que están abandonando la idea de retornar a Yaffo o Acre.

¿Con quién lo discutió? ¿Con los palestinos? ¿Con los americanos?

Lo discutí con los americanos cuando (el ex-enviado estadounidense a Medio Oriente) George Mitchell llegaba al país. Le dije, “Mire, yo podría poner mis propias precondiciones”. Si se tiene buena fe y se quiere resolver un problema, no establece obstáculos para negociar sino que allana el camino. Los palestinos insertan, y reinsertan ese tema a fin de evitar las negociaciones.

¿Cuál fue la respuesta americana?

Pienso que lo entendieron.

El Cuarteto, en su declaración del viernes, llamó a ambas partes de abstenerse de acciones provocativas. Este martes, el comité de Planeamiento de Distrito del Ministerio del Interior trata un proyecto para construir 800 nuevas unidades en Gilo. ¿Eso es algo que le preocupa? ¿Es esto una repetición de lo que ocurrió en Ramat Shlomo cuando el vice-presidente estadounidense Joe Biden estuvo allí el año pasado?

Pienso que la gente entiende que, en un área metropolitana como Jerusalén, con tres cuartos de millón de personas, hay planeamiento que toma lugar para nuevos proyectos. La gente tiene familia. La familia tiene hijos y las comunidades crecen: estas progresan en los barrios árabes y en los barrios judíos de Jerusalén. Tengo que decir que es una de las zonas donde la masiva burocracia de planificación de Israel obtiene la mayor atención internacional. Tenemos tantas etapas, tantas fases de aprobación que, cada vez que un plan avanza, sale en los titulares del mundo. No debería estar en primer lugar y quiero decirles que estoy haciendo más eficiente el proyecto de manera que haya menos etapas.

¿Consideraría intervenir y frenar esto por el timing? ¿Está preocupado que esto cause vergüenza con los americanos?

No creo que haya algo nuevo. Hacemos planes en Jerusalén. Construimos en Jerusalén del mismo modo en que los gobiernos israelíes lo hicieron durante 44 años, desde el fin de la guerra de 1967. Edificamos barrios judíos. Los árabes construyen en barrios árabes. Ese es el modo de vida en que esta ciudad crece y se desarrolla para sus residentes (judíos y no-judíos).

¿Los americanos son concientes del plan de Gilo?

Lo saben; lo siguieron durante un largo tiempo. No hay nada nuevo.

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se está ahora comprometiendo con la declaración de estado de la AP. Durante semanas, junto a su vocero, dijeron que no discutirán la reacción israelí hasta que algo ocurra en el territorio. ¿Es suficiente el hecho que ahora estén yendo al Consejo de Seguridad para una reacción israelí?

Ante todo, pienso que vieron nuestra reacción en Naciones Unidas, tanto en lo que dije como en lo que se logró y no fue alcanzado por ellos que no logran tener los votos que esperaban obtener en el Consejo de Seguridad. Pienso que es una importante enseñanza. La comunidad internacional quiere que, los palestinos, aparten sus precondiciones y continúen con las negociaciones. Pienso que cambió mucho durante los últimos meses.

Aprecio la postura que el Presidente Obama adoptó, su discurso en Naciones Unidas, el hecho que bloquease la entrada de un estado palestino (como estado miembro de Naciones Unidas). Y debo agregar que, la cooperación en seguridad entre Israel y EEUU, nunca fue mejor.


EEUU ¿tiene los siete votos necesarios, en el Consejo de Seguridad, para evitar el uso del veto?

No los conté en las últimas 24 horas, pero es notable que me lo esté preguntando. Con seguridad, no lo hubiese hecho unos meses atrás.

¿Es debido a una apreciación más amplia de la situación, por parte de la comunidad internacional, o porque EE.UU. está presionando fuerte a esos países para unirse al grupo?

Por ambas cosas.

Mencionó el discurso del Presidente Obama. ¿Se sorprendió del grado de simpatía y empatía que manifestó?

No. Estuve muy satisfecho. Es una expresión natural de la profundidad de lazos entre EE.UU. e Israel… Hay una fuente de apoyo en EE.UU. que nace de los corazones del pueblo americano. Es un privilegio muy importante que el pueblo de Israel y el Estado de Israel tiene y que debemos atesorar.

Cuando comparo lo que el Presidente dijo en el pasado y lo que afirmó en Naciones Unidas, estoy sacudido por una dramática diferencia. Me pregunto ¿qué pasó? ¿Por qué habla ahora de un modo que muestra un mayor entendimiento hacia nosotros y nuestra situación que la que demostró en el pasado?

Lo escuché muchas veces hablar sobre la importancia de Israel para EE.UU; la jerarquía de la alianza; la calidad de la seguridad; nuestro cariño al hogar nacional judío. Esas son cuestiones que escuché antes y me alegra oírlas, otra vez, con tal claridad.

Durante su discurso ante Naciones Unidas, hizo, otra vez, una observación conciliatoria hacia Turquía. Se le devolvió con un discurso muy duro por parte de (Primer Ministro Turco Recep Tayyip) Erdogan y sus comentarios del domingo que Israel mató a cientos de miles de palestinos y usa el Holocausto para perpetuar su victimización. ¿Discutió sobre Turquía con el Presidente?

Sí, entre otros temas.

¿Qué se puede hacer al respecto? Hasta ahora estuvo muy contenido respecto de Turquía. ¿En qué momento dirá ´Basta ya´, y responderá a lo que el primer ministro de Turquía dice?

Sabe que elijo responder al Informe Palmer (de Naciones Unidas) sobre el Mavi Marmara de manera positiva. Y, de paso, creo que es una cuestión importante para Israel. Fustigué a Naciones Unidas, y con toda razón, por sus ofensas de años contra la verdad y contra Israel, pero tengo que decir que el Informe Palmer es uno de los pocos casos en los que se realizó un informe justo y, en gran medida, equilibrado hacia Israel, bajo los auspicios de Naciones Unidas. Pienso que (el Secretario General de Naciones Unidas) Ban Ki-moon debería recibir crédito por el comité que armó y su elección de gente seria para integrarlo.

En lo que respecta a nuestros intereses en esa región, puede estar seguro que es algo que hago todo el tiempo. Elijo mis palabras, con cuidado, a pesar que soy capaz de hablar con gran temple. Pienso que lo vio en Naciones Unidas, pero, a veces, contener el lenguaje resulta útil. Solo podemos esperar que sea visto así por las otras partes en Medio Oriente. No siempre es el caso, cuanto menos.


Los israelíes ¿deberían estar preocupados por una confrontación militar con Turquía luego de escuchar las amenazas de Erdogan y todo lo que dijo?

Pienso que los líderes serios de Medio Oriente saben que tienen un interés común en mantener la paz y la estabilidad. Nadie debería dudar sobre la preferencia de mantener la estabilidad y la paz en nuestra zona. Es el interés común de muchos; a pesar del flujo y reflujo de retórica.

Pero ¿qué puede decir acerca de la retórica? Qué acerca de los comentarios de Erdogan sobre el Holocausto y el asesinato de miles de palestinos?

Ambas acusaciones son falsas. Son injuriosos cargos contra Israel que no tienen nada que ver con los hechos. Israel perdió miles de ciudadanos por el terrorismo palestino, y no quitó las vidas de miles de palestinos. Lamento escuchar esas declaraciones por parte del líder de Turquía.Este es un país que -de acuerdo con los informes de la OCDE- actuó contra la libertad de prensa, como ningún país de Europa lo hizo, con periodistas encarcelados y restricciones a la libertad de prensa. En Israel fuimos “usados” para contar la verdad y la verdad es que las acusaciones son falsas.

No usamos el Holocausto. El Holocausto fue el peor crimen en la historia perpetuado contra nuestro pueblo. Oír esa acusación, a principios del siglo XXI, a solo poco más de 60 años después del Holocausto es injurioso. Es injurioso.


¿Turquía fue un tema principal de discusión en sus conversaciones en Naciones Unidas?

Fue planteado varias veces. Las políticas de Turquía, la dirección de Turquía es de interés de muchas naciones en la región, no solo de Israel… Estoy seguro que es una preocupación general, no solo para Chipre o Grecia. Pienso en los países que quieren ver diferentes actitudes y perspectivas en Medio Oriente. Es suficientemente turbulento e inestable; no tenemos que agregar declaraciones ni acciones irresponsables a esa turbulencia e inestabilidad.

Algunas de las críticas aquí sobre su discurso en Naciones Unidas fue que mientras articulaba los temores israelíes, no daba ninguna esperanza.

Hay esperanza. La esperanza que tenemos es basarnos en los principios que sabemos que nos sirvieron bien no solo a través de la vida del Estado sino, incluso, durante todo el curso del sionismo y de nuestra historia.

No podemos construir esperanza sobre la base de mentiras. No se puede. Tenemos que decir la verdad. La esperanza se materializará, como futuro mejor, cuando los palestinos decidan contar la verdad a su pueblo. Y, la verdad, puede ser juzgada objetivamente; no es nuestra verdad comparada con la de ellos.

Cualquier observador, justo e imparcial, puede decirles si el pueblo judío estuvo aquí durante 4000 años o no. Y cuando eso es, por completo, ignorado desde el lado palestino, sabe que algo está mal. Porque no pueden pronunciar las palabras "pueblo judío y Estado judío?". Hay un problema y uno no puede construir esperanza cerrando los ojos y diciendo "no importa". Por supuesto que importa. Este es el meollo de este conflicto. No es sobre los asentamientos. Es sobre el Estado judío. Y tiene que ser dicho una y otra vez. Para que la verdad sea escuchada contra las sistemáticas mentiras, hay que repetirla. Traté de hacerlo de diferentes maneras.


¿Cuál fue, según su pensamiento, la línea más importante de su discurso en Naciones Unidas?

Pienso que la observación más importante fue que Israel quiere la paz con el estado palestino y que los palestinos quieren un estado sin paz. Eso fue un resumen de lo vinculado a esa sesión.Quise llevar adelante la conexión histórica del pueblo judío con la tierra de Israel, algo que es desestimado por Abbas, y algo que el mundo necesita recordar todo el tiempo.

Además, quise revelar la reciente experiencia que tuvimos de dejar vacante a Gaza hasta el último centímetro, y lo que transpiramos como resultado. Propuse la teoría, que ahora presentamos, que deberíamos solo alejarnos (solo alejarnos), demoler los asentamientos, entregar las llaves a la AP y esperar lo mejor.

Bien, hicimos eso, y vimos lo que ocurrió. Pienso que fue un modo simple de explicar al mundo lo que la mayoría de los israelíes comprenden: que no podemos permitirnos una replica de lo que pasó en Gaza o de lo ocurrido, antes, en Líbano.

Esos tres temas fueron importantes.


Escuchó el discurso de Abbas y cuán lejos está de reconocer cualquier conexión judía con la tierra. De manera que ¿dónde estamos?

Pienso que nos deja con un signo de interrogación sobre si, los palestinos, quieren comprometer a Israel en un proceso de paz serio que lleve a ese conflicto a un fin. No hay duda que, los israelíes, estamos preparados y represento a la gran mayoría de los israelíes que están preparados para ingresar en negociaciones serias con los palestinos y concluirlas en un acuerdo serio que tome en cuenta nuestra necesidad de seguridad y reconocimiento.

Los palestinos se presentan para ganar y para satisfacer sus legítimas aspiraciones. Si sus metas son la eliminación del Estado de Israel y revertir la historia de los últimos 63 años; eso no va a ocurrir. Pero si quieren, en verdad, vivir al lado nuestro, en paz y seguridad, ese es un objetivo alcanzable.


Luego que hablara Obama, varios voceros palestinos dijeron que ya no era más un agente imparcial. ¿Está preocupado que EE.UU, por ese discurso, sea puesto de costado y reemplazado, tal vez, por los europeos?

No. No pienso que alguien tengo alguna ilusión acerca de la continuada importancia de EE.UU. y su primacía en la comunidad internacional. Es el poder más fuerte en la tierra. Es el país más importante considerando la región exterior de Medio Oriente. Tiene un fundamental rol para facilitar un acuerdo de paz y continuará en el futuro.

Pero escuché que el Presidente francés Nicolas Sarkozy quería un rol mayor para Europa. ¿Está preocupado si los europeos van a intentar hacer a EE.UU. a un lado?

No pienso que vayan a hacerlo, y no pienso que EE.UU. se permita, a sí mismo, ser dejado de lado.

Pienso que tanto los palestinos como los israelíes entienden por igual que EE.UU. mantiene su rol pivote cuando se trata de la comunidad internacional. Medio Oriente es una zona importante para los intereses americanos porque es una zona muy importante a nivel mundial. Y hay lazos profundos entre EE.UU. e Israel, importante para los ciudadanos y el gobierno de EE.UU. Pienso que aquellos que consideran que EE.UU. será apartado están equivocados.


¿Tiene algún significado para el Cuarteto hablar sobre auspiciar una conferencia de paz en Moscú?

Bien, no el significado implícito en su pregunta; eso no va a ocurrir.

En las entrevistas que dio en EE.UU, se le preguntó, una y otra vez, sobre la política estadounidense y los candidatos presidenciales republicanos Rick Perry y Mitt Romney, demoliendo a Obama por su política hacia Israel. No quiso entrar diciendo que "no se tiraría bajo el autobús de la política americana". Pero quiero abordar la pregunta desde un ángulo diferente. Sus palabras más recientes, elogiando a Obama, fueron utilizadas por grupos judíos que apoyan al presidente. Está preocupado por el efecto contrario, ¿qué podría obtener sin querer en esta campaña por medio del elogio a Obama?

No entro en el campo de la política americana. En todos los tiempos, en todas las administraciones, el primer ministro de Israel y el presidente de EE.UU, en todas las administraciones, representan al pueblo de ambos países que tienen un profundo lazo de amistad y afecto y eso queda reflejado en las cosas que dije.

Además, cuando el presidente de EE.UU. hace algo importante (como bloquear una iniciativa injusta en Naciones Unidas), pienso que debo expresar mi aprecio y eso es lo que hago.

Israel parece estar convirtiéndose en una cuestión para ejercer presión en las elecciones americanas. No en lo que a mí respecta
.


Pero ¿qué puede hacer Israel para asegurar que no ocurra?

Solo ser honrado, ser franco. Sólo afirmarse en sus posturas, mantenerse sobre sus intereses y principios y dar la bienvenida a buenas políticas cuando se las considere. Y eso es lo que hago.

Su discurso en Naciones Unidas dio un fuerte rebote en una encuesta publicada hoy (lunes). ¿Cómo puede conservar ese rebote?

No voy a dar esos discursos cualquier otro día. Lleva demasiado tiempo escribirlo. Hay un flujo y reflujo en la política. Hay que ser lo suficientemente experimentado (y tengo suficiente experiencia) de no tomar demasiado a pecho cuando la corriente está subiendo y no desconcertarse cuando las aguas están bajando. Mi consejo, para mí mismo, es estar seguro de cómo uno va.

¿Se reunió en Naciones Unidas con algún representante árabe, alguno de Egipto o Jordania?

Estuvimos en contacto un tiempo limitado. Llegué con pocos anuncios. Me concentré en los miembros del Consejo de Seguridad, en esa visita y en escribir el discurso. No se escribe por sí solo.

La tensión con Egipto parece haberse calmado un poco.

Así espero. Pienso que es para beneficio de Egipto como para Israel, y para beneficio de la paz. Pero hay muchas fuerzas que buscan socavar esa paz, buscando enrollarla, usar el Sinaí no solo como área de puesta en escena para ataques desde Gaza sino buscan usar a Gaza como zona de lanzamiento de ataques desde el Sinai. Eso es un desarrollo problemático.

Compartimos nuestra preocupación con el gobierno egipcio.

Compartimos nuestra inquietud con el gobierno americano y estamos tomando acción de nuestro lado de la frontera; en principio levantando un cerco fronterizo, para reducir el peligro de ese acontecimiento. Pero debería haber un interés subyacente de todo gobierno egipcio (presente y futuro) para mantener la paz con Israel, tanto por el beneficio de la paz como por el de los intereses egipcios.


¿Confía en que ese será el caso?

Espero que la importancia de mantener la paz sea comprendida por todas las partes en Egipto. Pienso que ese mensaje fue dado a los egipcios, con claridad, por parte de los EE.UU.

La victoria de Shelly Yacimovich en el Laborismo y ese resurgimiento del partido en las encuestas, ¿cambian –de algún modo- sus cálculos políticos?

Dejo la decisión de otros partidos a los otros partidos. Ellos eligen su propio liderazgo y son bienvenidos de hacerlo. Pienso que el público israelí tiene clara elección entre las filosofías políticas, en especial cuando se trata de la cuestión de nuestra seguridad y el modo de asegurar el futuro de Israel, su prosperidad y durabilidad. Y pienso que mostramos que podemos conducirnos de manera responsable y experimentada.

En víspera de Rosh Hashana, quisiera preguntarle ¿dónde piensa que el país estará, en esta época, el año próximo?

Espero avanzar con negociaciones genuinas para una paz genuina. Pero pienso que la experiencia de Israel mostró que el mejor garante de nuestro futuro es la construcción de nuestro país: que construyamos nuestro país, nuestra sociedad, nuestra defensa, eduquemos a nuestros niños y continuar desarrollando el Estado de Israel.

Siempre quisimos, desde el primer día, la paz con nuestros vecinos. Llevó muchas décadas alcanzarla con los egipcios y los jordanos. No esperamos construir nuestro país hasta que la paz sea alcanzada. No lo esperamos, ahora.

Estamos entrecruzando a Israel con una red de caminos de circulación rápida y ferrocarriles, modernizando nuestro sistema educativo, recuperando nuestra educación superior, construyendo un cerco de seguridad en el sur, introduciendo la competitividad dentro de mercados rígidos y en otros que habían cerrado en todas las zonas. Trabajamos en el medio ambiente, en el sistema de salud y sobre todo tenemos una economía muy, pero muy, sólida. Introdujimos reformas económicas que crearon una enorme recuperación de la economía israelí de manera que, ahora, se destaca comparada, virtualmente, con todas las del mundo occidental.

Israel es un lugar único porque tuvimos las políticas adecuadas para darnos fortaleza económica; fortaleza militar (que depende de nuestra economía) y, por supuesto, fortaleza espiritual al poner énfasis en los valores generales del judaísmo que ahora están siendo enseñados en las escuelas.

Tenemos mucho más por hacer. Al acercarse un Año Nuevo, podemos decir que hicimos un gran trabajo y continuaremos en este camino. Ese es el mensaje que tengo para el año entrante: tenemos que continuar fortaleciendo al Estado de Israel. Esa es la mejor garantía para el futuro y, en última instancia, el mejor garante para la paz. No se hace la paz con el débil. Se hace la paz con el fuerte.


FUENTE: CIDIPAL-J. POST-KEINON-ENTREVISTA A NETANYAHU

COMENTARIO:

Me encantó, me parece que esta entrevista nos dice mucho sobre la personalidad de Netanyahu. No creo que éste sea el peor momento para un Primer Ministro de Israel, sino uno donde se necesitó a una personalidad que tuviera carácter, inteligencia y al mismo tiempo, la capacidad de no alterarse a pesar de las críticas de propios y extraños; saber qué es lo que conviene hacer en esta etapa en que le tocó conducir los destinos de su patria.

Tuvo paciencia con Obama que evidentemente cambió su actitud que en un principio fue bastante agresiva y logró que respaldara la política de Israel ante un Abbas que pensó podía ganar la partida en la ONU. Sigue siendo amigable con sus ex-aliados: Turquía y Egipto; se mantiene firme ante las embestidas de la Autoridad Palestina contra los intereses de Israel. Jordania no parece querer perder su histórica relación con Israel. Con la
OLP no hay esperanzas.

No es poco cuando todo está tan complicado: Irán continúa siendo una grave amenaza potencial, Siria es otro frente de tormenta, lo mismo que Hamás en Gaza y Hezbollah en Líbano. Todos podrían mellar su espíritu, tiene inclusive un frente interno que lo cuestiona por lo que hace y por lo que deja de hacer. Pero él está actuando según sus convicciones y con buenos resultados, hasta ahora.

Su frase final nos explica cómo cree que debe ser su política en general: "Se hace la paz con el fuerte". Y me parece que acierta, no impone la fuerza que en realidad tiene Israel, busca el acuerdo, pero también se mantiene fuerte para no aflojar cuando se está rodeado. Y lo está. Debe trabajar mucho en todos los aspectos, en la política exterior con una diplomacia muy activa, y en el desarrollo permanente de los objetivos que se ha planteado. Pero sobre todo, en un mundo que no quiere entender y donde reina la incomprensión, derrocha calma.

Quizá ese sea el secreto de la cultura judía, la soledad de los libres, con una libertad absoluta que sólo puede estar en la mente, donde los más feroces carceleros no pueden entrar; la construcción permanente, más que nada en el mundo de la imaginación y las ideas; la certeza de tener un destino, uno por qué luchar; la serenidad de saber que hay que ser capaz de prevalecer en un mundo irracional donde la razón la da la fuerza; adaptarse y seguir adelante, para todo eso se necesita claridad de objetivos, convicción y paciencia, mucha paciencia. Netanyahu la tiene.

ANA


2 comentarios:

  1. Gran entrevista. Pienso que Israel saldrá victorioso de todos los desafíos presentes y futuros que se le impongan, como salió airoso de las tremendas pruebas a las que fue sometido en el pasado. En mi humilde opinión, la cuestión con Irán y sus satélites se resuelve en 2012... con eso, prácticamente se acabarán las principales amenazas a la seguridad que sufre ese país. Una vez que se imponga la victoria en el frente contra los ayatolas, el liderazgo palestino se verá más presionado, facilitado y necesitado para aceptar la paz con el Estado judío y la fórmula "dos Estados para dos pueblos". Todo Oriente Próximo puede que vea un nuevo amanecer.

    Con respecto a las demandas sociales de un sector creciente de la juventud israelí, pienso que llevará más tiempo satisfacerlas. Pero también confío en que el éxito económico servirá para un aumento de los beneficios sociales que tanto protegió un Estado benefactor como Israel hace no mucho tiempo.

    Espero que Netanyahu y todo el pueblo esté a la altura de las circunstancias

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  2. Hola Anónimo:

    Más de una vez, ante tantas críticas a Netanyahu de todos lados, me he preguntado cuanta entereza, claridad de ideas y salud mental debe tener para soportarlas y no perder el rumbo. Esta entrevista nos da una idea de las razones por las que el pueblo israelí lo apoya, a pesar de tener también -como en todo el mundo- protestas por una mejora en las condiciones de vida de la gente. Pero es natural que así sea, la situación económica mundial es catastrófica e Israel debe estar sufriéndola de alguna manera. Pero eso se resolverá, no parece que haya hambre en Israel.

    Cuando se leen las posiciones fluctuantes de todos los países con respecto a Irán no se puede saber qué ocurrirá. Las revueltas en Irán en la última elección fueron aplastadas como lo son ahora en Siria y, aunque Ahmadinejad está, aparentemente, en la cuerda floja, no hay perspectivas de que la política de los Ayatollahs cambie con quien lo reemplace.

    Para la comunidad Internacional actuar militarmente es una decisión muy difícil y prever qué hará es imposible. Sólo podemos especular sobre lo que vemos. Irán continúa adelante con sus avances nucleares y el único que está allí y sabe qué pasa es Rusia, los técnicos son rusos y la llave de lo que hacen la tiene Rusia. ¿Quién les puso el Stuxnet? ¿Quién les dijo: paren porque continuar es peligroso? E Irán paró... Irán no es Corea del Norte por más que lo ayude. Los iraníes dependen y están siendo cercados económicamente por todo el mundo, hay muchísimos tejes y manejes entre las grandes potencias que desconocemos. El resto somos peones, ellos son los protagonistas. A nosotros sólo nos llegan datos a ser interpretados, pero allí el que factura es Rusia y está por verse hasta cuando podrá pagar Irán. Los S-300 que Rusia les prometió a los iraníes siguen embalados en puerto, Irán amenazó con ir a la Corte Internacional para que cumpla con el compromiso de entregárselos. Rusia veta como lo hace EE.UU, el poder lo tienen ellos. Y está China.

    Ojalá la amenaza de Irán desaparezca pronto, aunque serán ellos quienes decidirán cuándo deje de serlo. Las potencias facturan, creo que eso es lo que les interesa y venden lo que quieren a los giles (los tontos) que creen que son independientes, y aunque pueden comprar, fabricar o copiar, no tienen el know how. Pueden destruir pero no desarrollar tecnología de avanzada, y allí se para todo.

    Me encanta tu actitud positiva sobre el futuro de Israel, ojalá sea así, más que nada porque para el mundo es la primera espada contra el mesianismo que amenaza a todos y sería justo que pudiera dedicarse a construir libremente en lugar de tener que defenderse. Pero todos los países que lo circundan son compradores de armas, así que mientras paguen, los titiriteros se seguirán dedicando a criticarlo mientras viven del conflicto que ellos perpetúan alimentando a sus enemigos. No hay otra explicación para entender qué pasa con los palestinos a diferencia del resto de los refugiados del mundo.

    No hay forma de comprender lo que pasa en Medio Oriente, sino que les conviene mantener un conflicto permanente. Acá los llamamos H.P. (El significado no lo vas a encontrar en Google, y no es caballos de fuerza, jajajajaja).

    Así y todo, Israel tiene sobre sus espaldas una larga historia que lo sostiene, nunca estuvo mejor que ahora, pisando la tierra por la que tanto lucharon los judíos y puede defenderse. Sobrevivirá.

    Saludos y gracias por tu mensaje.

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