sábado, 7 de marzo de 2009

310 - LOS JUDÍOS EN LA EUROPA ACTUAL


ISRAEL ES EL JUDÍO DE HOY

Por GUY BECHOR

(Traducción libre)

Es difícil creer que la pregunta vuelva a realizarse después de 70 años: ¿Es posible la existencia judía en Europa, pero en el 2009?


¿Pueden, en el 2009, los judíos llevar una vida judía, orgullosa y libre en ese continente de recuerdos tan horribles? La respuesta es NO.

Un judío no puede caminar por las calles europeas si tiene símbolos judíos en su vestimenta o exhibir una conducta judía, no puede estar en establecimientos judíos si no está rodeado, protegido por policías y guardias, aislado por cercos y cerraduras, siempre preocupado, siempre en guardia. Si, cierto, el que haga “desaparecer” cualquier símbolo de su judeidad podrá “infiltrarse” en el medio ambiente hasta que llegue el momento desagradable en el trabajo, en la escuela, en la vida...

Me ocurrió, en los últimos meses, visitar diversas comunidades en el continente europeo, entre otras, Turquía, Francia e Inglaterra, antes de la operación en Gaza. Vi con mis propios ojos la pobreza espiritual de la existencia judía en esas comunidades. Sí, si se esconde la Estrella de David y si se acepta que las sinagogas y establecimientos judíos sean como castillos inatacables o guetos cercados, si se acepta recibir amenazas por la calle, oír casos de actos de antisemitismo -que aumentan día a día- entonces, sí puede haber una existencia judía, pero asustada, avergonzada, rendida.

¿Pero sentirse seguro en sus propios países? No precisamente...

El antisemitismo es esencialmente europeo, más cuando millones de musulmanes inundan el continente y hacen del conflicto con Israel y los judíos un instrumento para afianzarse en el medio europeo. La crisis económica mundial es utilizada contra los judíos y contra las firmas financieras de las cuales el mundo gozó durante medio siglo y, cuando hay pérdidas, “el dinero judío domina al mundo”, como declaró la vice-ministra de RR.EE de Sudáfrica.

Cuando en Turquía o Italia hay quien señala los negocios de judíos para que los lugareños no compren en esos lugares, ¿qué futuro hay para los tres cuartos de millón de judíos desperdigados en Europa occidental?

Los mismos que luchan por el país que los sigue considerando extranjeros, como en el pasado.

¿Que futuro hay en un continente que día a día se islamiza? ¿Que prohíbe tranquilas manifestaciones en la capital sueca por miedo a la violencia musulmana en ese país?

¿Y cual es la diferencia entre 1939 y 2009?

Que hoy, a diferencia de entonces, hay un estado judío, un estado exitoso, rico, donde el estándar de vida no está muy lejos en los últimos decenios del promedio europeo. El producto nacional bruto por persona en diciembre del 2008 fue de U$S 39.000 en Gran Bretaña y en Israel en el mismo mes y año fue de U$S 29.000.

¡Abandonen esos países donde la palabra antisemitismo esta vivita y coleando!

El aumento de varios cientos de miles de judíos fortalecerá a Israel, acabará con el sueño árabe de la victoria demográfica. Con ustedes. Cuando lleguen acá no transformarán a Israel en uno de los veinte países más ricos del mundo, eso ya los somos. Sino a uno de los diez países más ricos de la tierra.

Tienen una patria. ¿Por qué aceptan ser ciudadanos de segunda o tercera clase? ¿Por qué tienen miedo de demostrar que son judíos? ¿Por temor a ser atacados en el subterráneo?

Esa es la diferencia. No vengan solamente por Israel, sino por vuestra identidad, para vuestros hijos.

Paradójicamente, nosotros, los judíos de Israel, estamos sedientos de las persecuciones antijudías en Europa, porque ellas fueron en el pasado la última razón para que el Estado de Israel fuera creado y sería para los judíos de Europa de hoy la primera razón para su vuelta a casa: Israel es el refugio, el hogar de todos los judíos del mundo.

FUENTE: IEDIHOT AJARONOT

COMENTARIO:

Me llegó esta traducción que me parece realista y dolorosa. No es fácil abandonar el entorno en el que ha transcurrido toda la existencia, no lo fue en el pasado cuando los optimistas fueron masacrados y los pesimistas se salvaron a tiempo. Eso no volverá a repetirse en Europa, soy una optimista, pero, hay tanto de qué enorgullecerse siendo judío que tener que ocultarlo en alguna parte me parece que debe ser una autoagresión que requiere una fortaleza menor para decidirse a abandonar el lugar donde no se es apreciado. Donde no se lo distingue por lo bueno sino que se lo observa como a un cuerpo extraño. Y empiezo a perder la calma.

Israel no es sólo el hogar de todos los judíos, ni tampoco es únicamente un país del primer mundo, democrático, hecho desde cero con inteligencia y con proyección de futuro. Para mi Israel es el orgullo recuperado, el poder plantarse frente al mundo diciendo soy judío, soy israelí, tengo mi patria y en ningún lugar del mundo me observan de manera diferente: finalmente estoy entre los míos, y el coraje de abandonar lo conocido dará sus frutos si dentro de sí cada judío podrá sentirse plenamente un individuo más, ni más ni menos.


Libre.


8 comentarios:

  1. Ana, esa es la palabra : libre

    Un abrazo

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  2. Casiopea: Gracias por tu mensaje, vivir para ser libre, ¡qué maravilla!

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  3. Efectivamente, Ana, eres optimista pero tienes razón. Israel hace sentir a los judíos libres , sabedores que en ese espacio nadie los ofenderá por rezar a un Dios que no está tan lejano del de los agresores, o por , simplemente , compartir ese espacio sin la necesidad de rezarle a ninguno, pero con todo, judíos y sabedores que los agresores acechan, pero Israel es el oásis, su vida. Como siempre eres objetiva y acertada. Saludos

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  4. Muy buen articulo y muy buen trabajo realizas en tu blog
    Saludos desde Mar del Plata....Shalom

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  5. Estoy leyendo tu blog y me gustaria contarte entre mis blogs favoritos....

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  6. Gracias Iojanan, creo que Israel es un himno a la libertad de un pueblo que aún debe seguir luchando por ella. Un abrazo.

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  7. Anónimo: Gracias por tus palabras, son las que dan fuerzas para seguir adelante sin perder el rumbo. Shalom.

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  8. Marcelo: Me encanta que hayas llegado a mi blog y ojalá sea capaz de conservarte. Un abrazo.

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